Con el diseño tan chulo que tiene el nuevo álbum de Dani Martín,’Lo Que Me Da La Gana’, hay que ver lo irregular de su último vídeo, ‘Avioncito De Papel’. La canción en sí es cuca, una balada marca de la casa, sutil, mejor interpretada por Camilo que por Martín mismo, a pesar de ser un tema suyo. Y es que Dani arranca un poco entusiasta sus versos, y cuadran mejor los del invitado, que los canta con un poco más de sosiego. Quizás si hubiera empezado Camilo y seguido Martín hubiera cuadrado mejor. Pero como decimos, ‘Avioncito De Papel’ es un corte bonito y emotivo.
Pero como somos y siempre seremos un coñazo, lo interesante del lanzamiento es hablar del vídeo. Que podría haber estado dirigido por Custo Barcelona o el diseñador de Desigual, vaya. La idea ha sido un poco coger de esto y de aquello, ponerse conceptual por encima de cualquier posibilidad, y terminar haciendo un collage de ideas que ni una portada de carpeta del instituto a finales de los noventa.
‘Avioncito De Papel’ tiene a una pareja de bailarines como protagonista, en un entorno natural pero no especialmente bonito, con una fotografía determinada… que luego es otra cuando Dani Martín y Camilo aparecen, con juegos de luces y un color rojo que no va nada con la parte de los bailarines. Y unos globos volando rollo fiesta de fin de curso. Y de pronto, el efecto Mufasa. Alguien pensó que ponerles a los dos superpuestos en el cielo de la escena de baile era buena idea. Allí, hablando desde las estrellas con un efecto de Movie Maker. Desluce un poco el momento de emoción.
Para colmo de males, los créditos de ‘Avioncito De Papel’ aparecen en un entorno digital que nada tiene que ver ni con el baile, ni con el juego de luces, ni con los tonos apagados ni con el rojo. A su bola, en plan videojuego ochentero. Sólo ha faltado el mimo, el efecto multipantalla rollo ‘La Tribu De Los Brady’ y una parte de dibujos animados. Puestos a hacer un mess, llevémoslo del todo a cabo.
