Han pasado tres años desde que Jussie Smollet sufriera un supuesto ataque homofóbico y racista en las calles de Chicago. Y ha llegado el fin de la telenovela, casi haciendo homenaje a las tramas surrealistas que él mismo protagonizaba en ‘Empire’. El actor ha sido condenado a cumplir 150 días en prisión y una multa de cerca de 175.000 dólares por fingir la agresión y denunciarla posteriormente.
La defensa de Smollet ha tratado de rebajar la pena hasta el último momento, por un lado alegando los problemas que el actor podría tener en la cárcel por ser de origen judío, homosexual y negro, y por otro lado, porque, según sus abogados «ya había perdido todo lo que tenía en la vida a nivel profesional y económico» y consideraban que había sido suficiente castigo. La defensa pidió que su condena se limitara a trabajos para la comunidad.
Pero finalmente no ha sido así y tras rechazar fianza, el juez del caso lo ha condenado a esos cinco meses en prisión. El actor ha salido del juicio con un speech a la altura de todo el caso, durante el cual ha mantenido continuamente su inocencia, aunque las pruebas sobre lo falso de la agresión fueran bastante contundentes:
«Soy inocente y no tengo tendencias suicidas (lo comenta por si algo ocurriera en prisión). Si hice esto querría decir que estaría golpeando a los miedos de los negros americanos de este país en los últimos cuatrocientos años, y a lo miedos de la comunidad LGTBQ. Señoría, lo respeto y respeto al jurado, pero yo no lo hice.»
El juez respondió lo siguiente.
«Te has cargado tu vida con tu conducta y con este engaño. Has destrozado la vida que conocías y no hay ningún juez que pueda dictaminar nada que se compare al daño que tú mismo te has hecho.»
Ya nos diréis, de verdad, si todo este caso no parece una escena de la propia ‘Empire’. Ojalá descubrir que es todo un paripé para el comeback de la serie en una temporada especial de despedida.
