Zahara ha terminado liberando una versión de estudio y una en directo de ‘Esto No Es Una Canción Política’. Lo ha hecho casi a la vez que ha concluido el documental que la ha seguido en toda esta última era, ‘Esto No Es Un Documental‘. Y por supuesto, la canción no es una canción de Zahara cabreada en sitios. O con cosas. O con situaciones. Zahara está súper feliz en ‘Esto No Es Una Canción Política’. Zahara es prácticamente Sonia, si el pie de micro fuera su Selena. Zahara está con una mano en su cintura, Zahara lo que quiere es que cuando llegue el calor los chicos se enamoren. Zahara lo que necesita es que pudieramos referenciar algún tema más de Sonia & Selena pero es simplemente imposible.
‘Esto No Es Una Canción Política’ sólo iba a existir en los últimos bandazos de la Rave de Zahara, un show que ponía punto y final la era ‘Puta‘ y ‘Reputa‘ en clave pues eso, de rave. No va a decir que es una rave y después hacerlo en clave pop-chicle. No es Aitana. Ni siquiera es celiaca, que sepamos.
El tema no habla en absoluto de temática social, ni política, ni de las últimas polémicas que ha pasado este país a causa de ninguna crispación provocada por las altas esferas. Zahara está tranquilísima intepretándolo, porque es una baladita que posiblemente Sergio Dalma acabará versionando en italiano en una Nochevieja cualquiera. Una cosa tierna, sencilla, calmada. ¿Galilea? Una activista histérica al lado de esto. Greta Thunberg votando a Bildu, prácticamente.
Zahara ha explicado por qué finalmente la canción ha visto la luz en el último episodio del documental:
“Quería que esta canción viviera solo en la rave, en un lugar de seguridad. Pero es que cada vez que la cantábamos, la gente se volvía loca. Y esto hizo que el miedo se hiciera cada vez más pequeño. También hay una razón de peso: hemos visto cómo se han retirado libros de la biblioteca, cómo se han censurado obras de teatro, cómo se han cancelado proyecciones de películas infantiles.
Y todo esto lo han hecho las mismas personas que intentaron cancelar mi concierto y que censuraron la portada de mi disco. Solo que entonces no tenían poder y ahora sí.”
Pues mira, siete minutos para hacer un poco de meditación o bailar una lenta pegados y con la mente en blanco, que nunca está de más.
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Será tu rollo si: te encantan las baladas, eres una persona que toma té a las 5 y hace mindfulness a las 6, vas a los conciertos con un Tena Lady para no perderte na-da.
