Veintiuno han publicado un nuevo single, ‘Armadura‘. Y lo han hecho apoyándolo en una maravillosa explicación del tema en Instagram, por si no lo habíais entendido, un poco cuando a Katy Perry le dio por explicar el complicadísimo clip de ‘Woman’s World’. Inserte meme de Lluvia Pérez diciendo “es que si no no se entiende, ¿eh?”:
“Primero le das tu corazón a alguien, y te rompe un trocito. Y después a otro alguien, y te rompe otro trocito. Al cabo de un tiempo tienes tantos trocitos rotos que tienes que hacerle una armadura a tu corazón para que no te lo rompan del todo. Y te niegas a sacarlo de esa armadura durante mucho tiempo, y un día de repente aparece alguien a quien crees que se lo podrías dar, pero no te atreves. Le das, con miedo, la llave de la armadura y le dices “por favor, no me lo destruyas”.
Si ya lo decía Alejandro Sanz en uno de sus múltiples clásicos de antes de acabar convertido en el poeta de la mousse: tiritas pa’ este corazón partío. Solo que en el caso de Veintiuno, metalizadas, con cerradura y llave. No en clave BDSM, por mucho que los vídeos de esta era parezcan los de alguien que va a acabar participando en algo relacionado con ella en un especial de ‘21 Días‘. El programa documental, no el disco de Marta Sánchez. En clave romántica.
En clave sensiblona, en plan banda que te pone a dar saltos en un Festival, pero chico, también tiene ganas de acompañarte en una de esas tardes en las que, haciendo calceta en el sillón más incómodo de Ikea que pudiste permitirte, miras directamente a tu gato y le preguntas: “¿será este? ¿o me estoy equivocando otra vez?”. El gato, acurrucado en una esquina del sofá cómodo pero poco práctico para la calceta, responde con un “miau” que tú interpretas como “bah, inténtalo” y él interpreta como “que me dejes te he dicho, que es la hora de la siesta”.
El vídeo de la muchacha que acabará en una mazmorra BSDM como Aramís Fuster pero con peores pelucas esta vez no la lleva a caminar por la ciudad cámara en mano, sino a abrirse a una relación con la secretaria de un club de swingers que, por lo que sea, también lleva otra peluca de la era ‘Loud‘ de Rihanna. Incluso admite que le hagan una foto, fíjate si le va a abriendo su corazoncito. Pues cuidado con cosas así, que luego acaba una arrepentida y abogados mediante en el sexyono.
Será tu rollo si: has decidido romper con alguien que celebraba sus aniversarios en La Tagliatela; vas a los Festivales a escuchar música en directo y te sientes extraño allí; llevas gafas con montura metálica.
