Si pensabais que Sweet California iban a tener a Rocío Cabrera como su mayor decepción, es que no sabéis todavía lo que le ha ocurrido a las chicas con Iberia en las últimas horas. En favor de la compañía sobre su compañera, cabe explicar que, al menos, Iberia no las ha dejado tiradas. Pero eso sí, a cambio las ha maltratado como usuarias, clientes del servicio y popstars voladoras. Ir al aeropuerto a veces es lo peor.
Y es que las chicas llevaban equipaje de mano, pero les han pedido que lo embarquen -en una reciente y feísima costumbre de las compañías, por otra parte- cuando en el avión aún quedaba espacio para el equipaje, y ha tenido lugar un enfrentamiento con uno de los trabajadores de Iberia. Sonia comentaba lo siguiente en sus redes sociales poco después de lo ocurrido, dando incluso de forma pública el nombre del señor en cuestión:
¡Energúmeno! Sólo por el uso de la palabra nos posicionamos a favor de Sonia, aunque no estamos convencidos de no le hiciera facturar la maleta porque llevaba 400 botes de Farmatint en su interior, fatal envueltos en unas nada reglamentarias bolsas de plástico del Pryca. Fuentes cercanas a un amigo inventado aseguran, incluso, que la muchacha llevaba dos botes guardados en los guantes que vienen de regalo, lo que habría llevado a Antonio Pillado a cogerse un rebote tremendo.
Nada justifica, eso sí, el empujón que la Sweet California asegura haber recibido por su parte, y que posteriormente era también narrado por su compañera, Tamy Nsue, que asegura no sólo que el muchacho les habló con malas maneras, sino que su equipaje de mano terminó llegando dañado. Y sin venir desde el Himalaya, ni traer el fuego y la calma.
Mientras tanto, la tercera componente del grupo también parecía visiblemente conmocionada por lo ocurrido, y Alba posteaba lo siguiente en su timeline, solidarizándose así con el drama de agresiones y maltrato del 66,6% de la banda:
Se ve que en el viaje de vuelta a Madrid no lo han pasado precisamente ‘Guay’.
