Cuando escuchamos el último álbum de Rozalén, ‘El Árbol Y El Bosque’, y llegamos a ‘El Paso Del Tiempo’, la verdad es que dijimos, “wow, le han vuelto loca los celos por su boca, un funky, que locura, she’s so crazy we love her”. Y claro, tenía que salir como single porque chica, algo tan impactante como Rozalén entregada a los efluvios de la pista de baile debía ser algo público y compartible.
Y así llegó el vídeo de la canción, demostrando que si alguien tiene que ser nuestra Dua Lipa, esa es Rozalén. Por mucho que Marta Sánchez se adelantara con el disco de ‘Brillar’, la guinda sobre el pastel la pone este ‘El Paso Del Tiempo’. La pone Rozalén con un body rojo dándolo todo entre luces de colores con mujeres de todo tipo de cuerpos y procedencias. La única orden era bailar y bailar es lo que se ha hecho. A darlo todo con un funky.
Rozalén ha cuidado todos los detalles al máximo, e incluso cuando aparece con la máxima visual de la industria española, el momento de la banda tocando en faux-directo, se cubre de brilli brilli y se entrega al espíritu de los Bee-Gees y el John Travolta que podía peinar su pelo sin que pareciera un casco.
Incluso la intérprete de lengua de signos parece salida de un concierto de Fundación Tony Manero (recuerdo desbloqueado), con su pelo bien cardado y su glitter y lentejuela. Rozalén ha venido aquí para llevarnos de vuelta a los 70, colocarnos las plataformas con un pez sintético dentro -sería una ordinariez no ser funky animalista siendo de Rozalén-, y preparar el dedo para que de tanto subirlo y bajarlo nos acabe dando artrosis.
‘El Paso Del Tiempo’ es un canto contra el ageism y la aceptación de que todos cumplimos años. Cher ya está de camino a la Fiscalía con un traje de chaqueta rosa y un montón de documentos en una carpeta para denunciar su publicación.
