El nuevo single de Pink se ha publicado hoy, miércoles, a sabiendas de que la cantante perderá dos días de cómputo para las listas. Lo mismo le da, francamente, porque si algo ha aprendido Pink con su último álbum, es que no necesita especialmente de hits para mover cifras dignas y llenar una gira.
Si bien su primer single, ‘What About Us’, funcionó bien y suma más de 370 millones de escuchas en Spotify, ocurrió más bien poco con la canción que daba título al disco o ‘Secrets’, a pesar de su potencial como singles de lista. Un poco de ageism y otro tanto de haberse quedado descolgada de las tendencias de los últimos años pueden ser los causantes de la relativa baja forma de Pink en singles, pero insistimos: ni falta le hace, visto que ‘Beautiful Trauma’ terminó despachando 3,2 millones de copias mundiales, que para sí las quisieran Camila Cabello, Cardi B, Imagine Dragons o BTS. Hablamos de que Pink, sin hits y sobrexposición, ha vendido de su último álbum apenas un millón menos que Taylor Swift. O uno más que Ariana Grande con sus dos trabajos anteriores. Ahí es nada.
Convertida ya en un producto de álbumes, lo importante de ‘Walk Me Home’ es no arreglar nada que no esté roto, es decir, continuar con la fórmula continuista que lleva manejando desde el volantazo de ‘Trouble’ hace década y media, convenciendo a su público potencial de que sus canciones siguen siendo lo que buscan de ella. De hecho, ‘Walk Me Home’ cumple tanto estos estándares, que ha sido compuesta junto a Nate Ruess -co-autor del masivo ‘Just Give Me A Reason’– y ni falta hace que lo juren: el estribillo del single suena a material de Fun cosa mala.
Veremos si el handicap de su publicación en miércoles le juega en contra, si el estreno del vídeo ayuda o si la canción termina siendo un hit de forma automática, pero desde luego, Pink ha jugado sus cartas bien: sus últimos cartuchos antes de los 40 los dispara a una diana de premio garantizado.
