Bienvenidos a ‘OT: Segundo Asalto’, donde nuestro equipo de investigación, dotado de las mejores tecnologías como Youtube, un cuaderno de Hello Kitty y una agenda de 2004 que aún sirve porque los días sólo aparecen como numéricos y no como días de la semana, analizará los segundos lanzamientos de los chicos de ‘Operación Triunfo’. Porque sí, todos recordamos ‘Te Quiero Más’, ‘Vas A Volverme Loca’, ‘Vida’ o ‘Ellas’, pero… ¿sobrevivieron todos a su segundo asalto? Hoy, vamos con el que fuera el segundo single de Alejandro Parreño.
¿En qué consiste?
Consiste en hacer creer a Alejandro Parreño que está haciendo música rock porque a un descarte de David Civera y Lorca le han metido una batería y ya es posible que cuele como telonero de Metallica. Desgraciadamente, la estilista del muchacho no pilló la estrategia de su discográfica y seguía vistiéndolo como a un cuñado el día de la boda de su mejor amigo. La canción demuestra que antes de Fito Y Fitipaldis ya había flipados con gorra creyéndose el cantante de AC/DC. En cualquier caso, recordemos que Alejandro Parreño partía de ‘Ellas’, con lo que un paso adelante no era complicado de dar. ‘Paraíso’ es la típica banda sonora de serie de media tarde de la época.
https://youtu.be/56m3ueVo0f8
Lo mejor de la letra
“Pruebo el bálsamo de tus besos
sumergido en el mar de tu amor
el orgasmo de tus anhelos
me llena de sed y obsesión“
Especialmente en las dos últimas líneas, Alejandro intenta ser sexy a lo Christian Grey, pero termina quedado de asesino sexual creepy de película de Tiffani Amber Thiessen. De esos que en mitad de la noche se cuelan por la ventana de una habitación de madera oscura con un cuchillo en una mano y la cuerda en la otra. Por otra parte, ¿qué bálsamo prueba este señor sumergido en un mar? Peor metáfora existente, puesto que el bálsamo se diluiría con el agua del mar, se le llenarían los pulmones de agua salada, y ya estamos otra vez, colapsando los servicios de la Seguridad Social por dedicarnos a hacer sandeces.
Lo mejor del vídeo
Lo mejor del vídeo es que no podía ser peor que el del single anterior, que incluía poco más que una cortina de brilli brilli tras un escenario. En ‘Perdido En El Paraíso’, al menos, le dieron la oportunidad a Alejandro de tener unos exteriores. Y como era el principio de los dosmiles, cualquier vídeo cool que se preciara en la época tenía que tener el contraste entre lo viejo y lo moderno. Viejo, la ropa heredada de su bisabuelo, y moderno, esos efectos especiales que hacen que Alejandro pueda aparecer en cualquier lugar. Uy, ahí está, Uy, ahora allí. Anda, mírale donde sale ahora. Y no sólo eso, que también se contruye un edificio a trozos, porque el director del vídeo manejaba el Movie Maker que daba gusto, a ver si vais a creer que contrataron a cualquier para el rodaje.
Impacto social con respecto al anterior single
Lo cierto es que, si bien es cierto que ‘Perdido’ está bastante alejado parreño (such fun) del éxito del primer single de Alejandro, el impacto medio de ambos singles fue relativamente decente. No es una canción que el público vaya a saber tararear de primeras, salvo los triunfers, que pueden sabérselas todas de memoria, pero es posible que con un poco de ayude la recuerden más que otros temas vistos hasta la fecha, como el de Juan.