FórmulaTV ha lanzado un reportaje con fotos del desnudo de Juan Manuel Hidalgo, director de La2. Ay, no, espera, lo que han hecho ha sido entrevista, y hasta donde sepamos, el señor en cuestión estaba vestido. Es que ya es la costumbre, no sabe uno cuando está la gente vestida o no en ese portal.
El caso, el directivo, que ni hacía topless ni un posado sugerente ni nada, ha hablado de la nueva temporada que le espera al segundo canal de la televisión pública, y entre otras interesantes novedades (es un decir, sabemos que no veis La2 desde 1983, por mucho que presumáis de ello en encuestas del CIS), ha hablado del regreso del formato musical a la cadena.
Pero claro, ha hablado de un formato musical de los de bostezo y un 1,3% de share, seeking those rating records:
«Un espacio de actuaciones como podía ser ‘Música sí’ o ‘Séptimo de caballería’. Además, he puesto una condición: las actuaciones tienen que ser en directo, no pueden ser grabadas (…) Fundamentalmente la música va a ser más indie, alternativa y no tan comercial; pero si Enrique Iglesias o alguien de Eurovisión tiene que estar, podrá estar.
Nos parece perfecto lo del directo, no estamos ya en los noventa como para que la gente aparezca promocionando las cosas en playback en televisión, pero ¿por qué tiene la música que ser más indie y alternativa? Por que no aprovechar de una vez la oportunidad, y aceptar que en España, la «música indie» empieza a ser mainstream? Porque francamente, con estas declaraciones no nos imaginamos al señor invitando a un grupo de Talavera que ha tocado en tres bares de la zona y tiene dos maquetas, sino a perfiles del estilo de Vetusta Morla, Zahara o Sidonie. Es decir, caras perfectamente conocidas que, además, o cuentan o han contado con el beneplácito de radios. O acabarán contando, vistos los derroteros más indie de Los40 en los últimos meses.
Con la caída en ventas y el ascenso del streaming, en artista los indie venden tantos discos o más de los que vende Chenoa, Merche o Enrique Iglesias. Puede que no singles, pero sí álbumes. Por tanto, no hagamos de «el representante de Eurovision o Iglesias» una excepción, sino que hagámoslos parte. Un programa musical con cabida para todos.
Pero claro, ya nos llegan con lo siguiente:
«Radio 3 es un referente, es una radio de culto, y ahora mismo la tenemos en los conciertos por la noche que lo ven quienes lo pueden seguir. Sin lugar a dudas, hay una colaboración con Radio 3.»
O sea, que olvidaros de engancharos al programa los sábados por la mañana, porque lo van a ver los cuatro culturetas que siguen hablando de cómo les gustaba tal o nosequé grupo cuando sus demos y siguen dejándolos de escuchar en su primer play generalista.
Hartitos estamos ya de ese perfil sesgador. Aprendamos de los medios ingleses, por ejemplo y veamos algo como el playlist de BBCR1, en el que Little Mix se dan la mano con Bring Me The Horizon, y Royal Blood con Camila Cabello. Seguimos años detrás de donde deberíamos estar.
