La Picante Prenatal está de vuelta, y tan como prometió hace unos días, ha puesto a la venta el primer single de su comeback, ‘Baby Please Don’t Stop’. El regreso de la Spice Girl se dará en dos fases, esta del single, que ha sido presentado esta mañana en BBC Radio 2, y la del disco completo, a la venta durante el mes de abril, apenas semanas antes de que el grupo se reúna sobre los escenarios como cuarteto. Una situación que, tal y como contamos hace unos días, deja entrever que no habrá material nuevo de Spice Girls que apoye el arranque del tour ‘Spice World’.
El comeback de Emma Bunton se ha dado en clave retro, como se esperaba, especialmente porque ella misma dejaba claro que todo tenía un toque sixties. Y no hace falta que lo jure: su nuevo vídeo, su estética, la carátula del álbum e incluso su tracklist de versiones clásicas, dejan ver que el planteamiento es el de ponerse nostálgica y jugar a ser la Petula Clark de los menores de 45. Y en base a eso, Emma ha corrido los riesgos justos y necesarios para su regreso.
Lo que quiere decir que ‘Baby Please Don’t Stop’ es bonita, está bien cantada, bien producida, tiene un estribillo claro, simpático, e incluso tarareable, pero no termina de dejar huella. La producción es tan determinantemente sesentera, que no permite ni los guiños a la bossa de la era ‘Free Me’, ni el encanto Bond-sensual de muchas canciones de ‘Life In Mono’. De hecho, una de las cosas que más de menos se echa en el single es ese acercamiento a los ritmos latinos-tropicales vintage que sus dos últimos discos tenían como seña de identidad.
Emma juega esta vez sobre seguro, a convencer a radios adult, a vender el disco con una propuesta sencilla y amable, y a no competir: es la Unproblematic Spice, y su single está a la altura de su papel. Los fans, por lo menos, lo disfrutarán tranquilamente como no pudieron hacer con los más vergonzantes comebacks de Mel B o Geri: en el de Emma, a pesar de lo medido, no hay absolutamente nada que produzca bochorno.
