Segundo recopilatorio de versiones para Fangoria. Realmente estaba anunciado, así que tampoco es como si hubieran entrado en una espiral de covers al azahar como si estuviéramos en el pop mainstream español de los dosmiles. La banda cierra fase de covers con este recopilatorio que resume los temas que más les han influenciado del último par de décadas. Y es todo terrible.
Es decir, más allá del debate sobre la crisis creativa que pasa la banda, que tendría como exponente esto y el hecho de que Guille Milkyway haya hecho de ellos una versión siniestra de La Casa Azul, lo que es más importante es el debate sobre el gusto que tiene el grupo. Una pareja que, recordemos, tiene en su discografía cortes como ‘Retorciendo Palabras’, ‘No Se Qué Me Das’, ‘La Pequeña Edad De Hielo’ o ‘Dramas Y Comedias’. Joder, que lo saben hacer bien.
Y esto no está bien, este segundo trabajo de versiones, ‘Extrapolaciones Y Dos Respuestas’ es tan tremendamente malo, que en vez de una crítica a la que no sabríamos ni si dar una estrella, hemos optado por recopilar los cuatro mayores insultos a la inteligencia que contiene. Veámoslos.
‘Soy Yo’, Marta Sánchez (2002)
Si algo tiene la ‘Soy Yo‘ original es que su estribillo se clava a machete. Es infalible. Pero claro, es infalible porque Marta Sánchez le aporta una fuerza vocal de la leche. Alaska intentando entonar los versos centrales resulta francamente tragicómica. Para colmo de males, Fangoria ha vestido el tema con una producción pachanguera, como de recopilatorio baratuno de pleno verano en una gasolinera, y convertido ‘Soy Yo’ en un descarte de pop rumano que habría desechado la primera Inna. Suena, como casi todo el disco, a demo a medio terminar que uno ofrece a otro artista.
‘Desafíame’, Ríos De Gloria (2001)
Se supone que este álbum recopila temas que han marcado al dúo. Bien, pues lo mínimo es cantar las canciones con su letra original y no con una que se han encontrado en algún banco de lyrics a primer clic de Google. Ríos De Gloría eran los Amistades Peligrosas de horterismo elevado, pero al menos eran cómicamente SECSIS, mientras que el ‘Desafíame’ de Fangoria, con esa producción tipo In-Grid más demodé que el propio dúo original, provoca una desgana épica. La misma con la que la canción está cantada, que parece que buscaban más el comentario fácil provocado por semejante elección que por el hecho de que la canción suponga algo para ellos en realidad. ‘Desafíame’ les ha quedado arrítmica, sin gancho en el estribillo y lo peor de todo: aburrida.
‘Disfraz De Tigre’, Hidrogenesse (2007)
Mal vamos cuando nos tomamos demasiado en serio un smash del indie tontuno patrio como ‘Disfraz De Tigre’ de Hidrogenesse. Y está muy tomada en serio. De hecho, la dicción de la canción es digna de una actriz de doblaje en español que, para asegurarse un salario digno estando fuera del país, ha tenido que empezar a dar clases particulares del idioma. La producción es caduca, ruidosa, tremendamente molesta… aleja toda posibilidad de diversión durante la escucha. Y mira que la original era divertida. El momento «eres una planta» es digno de película pornográfica doblada de canal local a las dos de la mañana.
‘La Revolución Sexual’, La Casa Azul (2007)
No toques. ¿Por qué tocas? Menos mal que Guille es amigo, amén de productor, porque de lo contrario esto hubiera sido digno de block y report en toda red social o plataforma que compartieran. En ‘La Revolución Sexual’ de Fangoria no hay ni ganas de revolución, ni sensación de fiesta… ni siquiera hay pop. Han amagado una base house que no llega a serlo, con destellos pop que no llegan a serlo. Tierra de nadie en una revisión básica que resta cualquier peso a la letra, que debería ser el punto central del tema. Se queda sin fuerza, se queda lejos de ser el himno que es originalmente, y nos deja a todos con la sensación de: ¿realmente qué es lo que aporta Fangoria a toda esta historia?
