Dentro de apenas unos días, entre el 21 de 23 de julio, debía llevarse a cabo en Valencia el Festival Diversity. Pues va a ser que no: después de la filtración de la cancelación a varios medios como EFE o ABC llegaba al correo de los compradores el siguiente mensaje del Festival:
“Diversity València Festival se creó como evento internacional con una clara apuesta por la cultura como herramienta de transformación social. (…)
Estos últimos años han sido difíciles de afrontar y nos hemos topado con la compleja situación que el sector de la cultura y más concretamente el de la música está atravesando a nivel global.
Por todo ello, lamentamos comunicar que no podemos garantizar la realización del Festival en estos momentos bajo las condiciones necesarias para el buen desarrollo del mismo. Desde la organización hemos tenido que tomar la difícil decisión de cancelar definitivamente la celebración del Diversity València Festival 2022.”
El festival no explica las razones para la cancelación
Si os fijáis, es maravilloso el uso de “por todo ello” en el párrafo final. Hace suponer que Diversity ha ofrecido un razonamiento previo para la cancelación, pero no es así. Lo que dicen es que la situación del sector cultural es complicada ahora mismo.
Que imaginamos que también es complicada para el Primavera Sound, Rock Imperium, BBK Live, PortAmérica, Mallorca Live, Palencia Sonora, Azkena Rock, Interestellar, Sound Isidro, Tomavistas, Spring Festival… ¿seguimos? ¿O se entiende bien? No puede justificarse la cancelación con un argumento tan 2020 que parece que estén cancelando porque es complicado organizar algo en mitad de una pandemia.
La situación ha cambiado y las complicaciones del sector cultural son poco más o menos las mismas de siempre. Que haberlas haylas, pero difícilmente justifican que todo se venga abajo 10 días antes de abrir las puertas del Diversity.
Claro, el cartel
Así, de primeras, la cosa pintaba muy bien: Christina Aguilera, Måneskin, The Black Eyed Peas, HER, Martin Garrix, Kelis… en fin, un espectacular despliegue de nombres que hubiera funcionado a las mil maravillas en… erm, Sheffield.
La realidad es que el público español es muy suyo, y que el atractivo de Nicki Nicole, Karol G y Cupido -los dos únicos nombres en español del cartel- no era suficiente para atraer a masas. Atraes al público pop que quiere bailar ‘Boom Boom Pow’. Al de ‘Dirrty‘. Al que dice “oye, para una vez que puedo ver a HER”. Pista: esa gente no llenamos hectáreas y hectáreas de espacio festivalero. Seamos realistas.
De modo que todo era muy ambicioso, pero muy poco pragmático: muchos medios aluden -como es obvio- a que la baja venta de entradas ha provocado que los promotores del Diversity hayan decidido no seguir adelante.
Las devoluciones: otro melón a ser abierto
Evidentemente, el Festival ya ha informado de que las entradas serán devueltas durante los próximos días. Faltaría más. Pero, ¿qué ocurre con toda la gente que no iba al Festival desde Valencia? También es obvio que sería la gran mayoría, desplazada desde otras ciudades del país o directamente de Europa, si atendemos al cartel del Festival, pensadísimo para el público guiri.
Diversity, como el resto de Festivales, no se hace cargo de vuelos, trenes, taxis, hoteles y demás parafernalia que, repetimos, a 10 días del arranque de los shows, la mayor parte de la gente tendría ya reservados.
Y he aquí el melón a rebanar: ¿no deberíamos empezar a exigir seguros a este tipo de eventos que llegaran a cubrir ese tipo de gastos justificables? ¿Tiene realmente el público que cubrirse las espaldas ante tal grado de falta de profesionalidad y chapuza?