Anoche se entregaron Los40 Music Awards, esos premios que intentan ser una especie de VMAs a la española, pero siempre terminan llevándonos a acordarnos de los Premios Nokia Amigo o incluso de aquellos Otto de Oro que entregaba la revista Bravo. Claro que en el caso de esta última, se ahorraban la emisión por televisión y por ende, el ridículo nacional que la pobre emisora se marca año tras año. Todo con muy buenas intenciones, pero con una profesionalidad discutible.
Algunos años fallan los micros, otros el sonido, otros la iluminación, y este año directamente ha fallado de todo un poco, a modo de best-of de cagadas históricas de la entrega de premios. Una fantasía que pudo verse en Divinity y cuyas actuaciones ya están disponibles en ningún lado en absoluto.
La gala de este año tuvo como triunfadoras a dos estrellas femeninas, Ester Expósito y Sofía Reyes, que se llevaron el premio a Mejor Estrella De Paciencia Infinita y el premio a Mejor Estrella De No Cagarse En Los Muertos Del Equipo técnico respectivamente. Unas victorias arrolladoras frente a todo competidor, por dos momentos que marcaron la emisión de anoche.
En el primero, Ester Expósito aguantó estoica y sin perder los papeles a un César Vicente que se había tomado un par de antihistamínicos antes de la gala, por su alergía a los ácaros del polvo. De muchísimo polvo. El muchacho llegaba al atril poco después de que un estornudo suyo convirtiera el backstage en los exteriores de Arendelle en la versión live-action que prepara Disney para ‘Frozen’ y Ester tuvo los santos ovarios de continuar adelante como si nada. Menuda reina, incluso cuando ponía alguna cara de circunstancia, dada la situación. Ella intentando repartir un premio y él pensando en cuánta cantidad de pureza tenía… erm, el alma de los seres humanos de la sensibilidad.
Los40 siempre con rampas oblícuas. Igual César Vicente llevaba el zapato pelín grande. https://t.co/XfqGDLMErG
— ⚡ Odi O’Malley ⚡ (@odiomalley) November 9, 2019
En el segundo, Sofía Reyes sobrellevo un what-I-call momento Azúcar Moreno. Ella, preparada en el escenario, escuchaba como dos canciones al mismo tiempo sonaban cuando sólo debía hacerlo ‘R.I.P’. Que lo mismo si hubiera actuado Mónica Naranjo nadie se hubiera dado cuenta de que había dos bases, porque cuántas tienen en realidad sus singles, pero claro, siendo Sofía Reyes, pues cantó. Y la pobre pidió, en directo, que dejaran sonar a ‘R.I.P’ sola. Y las luces se encendieron, y volvió a arrancar, pero volvió a sonar todo mal. Ella se quitó los in-ears, se lo tomó con humor y pidió al público que gritara “como si hubiera pasado nada”. Igual que en los VMA de… o en los Billboard Music Awards de… o aquellos Brits cuando… o esa gala de NRJ de… no, espera, eso no ha ocurrido más que en una gala de Los40.
O en 1990 en Eurovisión. Bonito homenaje, equipo.
KAHSKSJ que feo lo que le pasó a Sofía Reyes en los #los40awards lloro pic.twitter.com/XCxrwXRVJd
— r (@rrodree) November 9, 2019