Llega el mes del Orgullo, y por ende, el pico de trabajo para Natalia, que ha aprovechado como cada año para lanzar un nuevo single. Efectivamente, es la canción de todos los años, pero tiene una nueva letra que es feminista, y unos nuevos arreglos que son flamenco. Porque si alguien hay que consiga seguir las modas con absoluto acierto y temporalización perfecta, esa es sin duda Ariana Grande, pero estamos hablando de Natalia, que hace lo que buenamente puede con el catálogo de Calcedonia de cada verano.
‘De Nada’, junto a la cantante cordobesa Lya, suena a que uno acaba de comprarse la Thermomix, y mete al mismo tiempo un pollo, varios vegetales, harina, huevos, azúcar, una tableta de chocolate y un litro de vino tinto, y espera que la maquina le saque la cena hecha en platos separados. Pero la tecnología no ha avanzado tanto y lo que termina uno comiéndose en un pollo chocolateado en el centro de una sopa de lechuga, ‘De Nada’.
En ‘De Nada’ hay elementos de flamenco, porque Rosalía, hay elementos de feminismo, porque ‘Lo Malo’, hay un drop imposible, porque el pop en 2014, pero como siempre, lo mejor termina siendo el vídeo oficial, donde Natalia saca lo mejor de sus raíces andaluzas rodando en Torrejón De Ardoz y Pozuelo Del Rey. Pero con volantes y flecos.
Lo que está claro es que los escenarios de finales de junio y principios de julio van a estar a rebosar de público expectante a que Trikini Kween llegue a lucir la coreo del single, con los pasos más míticos de la cantante (lo que para ella sería el baile de ‘Soldier’ que Beyoncé repite siempre que puede), las extensiones a golpe de GHD y las plumas, la lentejuela y las botas greco-romanas hasta la rodilla.
Y es que si con algo se puede contar ante un lanzamiento de Natalia, sea más pop o más flamessco, es que ella seguirá siendo un auténtico imán de views: en el vídeo que Salva Musté le ha hecho a ‘De Nada’, es maravilloso verla con corona, de troglodita chic o lista para las fiestas patronales.
Long live de T-Kween.
