A Nicki Minaj se le fue un poco el reloj de hora hace unos días, y al parecer, en un descuido volvió a 1999, cuando el rap era de uso exclusivo de los negros, y los blancos tenían que dedicarse a hacer, pues no se, country. Por un momento, todo volvió a la época en la que se cargaba contra Eminem por ser blanco y rapear mejor que muchos raperos de aquel momento, cuando Minaj, publicó lo siguiente en su Instagram:
“Es un buen momento para ser rapero blanco en América, ¿eh? Estas son las 10 canciones de rap más compradas en el iTunes de US”.
Semejante declaración se acompañaba de la captura de una lista que incluía los nombre de Post Malone, Eminem, G-Eazy y Macklemore. Ahora, juguemos a un juego: retrocedamos dos meses en el tiempo y hablemos de los raperos blancos que, desde enero y hasta noviembre, poblaron la lista de iTunes. Exacto: sólo aparecería ‘Rockstar’ de Post Malone. Es decir, que Nicki ha escogido una semana muy puntual en todo en año para que los 4 hayan aparecido: Mackemore no está precisamente en la cresta de la ola, G-Eazy estaba desaparecido hasta hace dos días, y Eminem acaba de volver. Con lo que su ironía ha caído en saco roto: el hip hop sigue dominado por los raperos negros, y la radio urbana también.
Porque sí, vendrán los fans a decir que no lo decía con retintín. Bitch, please: es Nicki Minaj. Sorbió el té en una gala televisada al lanzar shade. Pero OJOCUIDAO, porque ella misma, cabreada como una mona, trató de defenderse poco después, actualizando el post:
“ACTUALIZO: Sois unos gilipollas irritables. ES un gran momento para ser rapero blanco en América. Me gustaría contratar a alguno en mi sello. ¿Sabéis de alguno? (…) Mi enhorabuena a Eminem y Post. Dos de mis favoritos. Felicitaciones a Eminem por su nuevo álbum.”
Venga, hasta luego, Mari Carmen. Que sí, oye, podemos lanzar un speech de apropiación cultural de morirnos todos, hablar de la importancia del rap en la lucha del pueblo negro, etc, etc., pero es que veréis: el mensaje viene de alguien que acaba de rapear con Fergie. Que trabajaba en un álbum en el que Mariah Carey hacía R&B y coqueteaba con el hip-hop. Es que no se cómo deciros. Una señora que grabó ‘Starships’ y se quedó tan ancha.
Abracemos la diversidad, no hagamos a los blancos líderes de la lucha negra, pero aceptémoslos como aliados, Jesús, especialmente porque ya es triste poner barreras a la música. Minaj, como es obvio, terminó eliminando el post.
