Lewis Capaldi sólo ha publicado un disco hasta la fecha, pero ojo a los resultados del álbum en el Reino Unido:
- El álbum, ‘Divinely Uninspired To A Hellish Extent’
- 4 veces Platino (1,2 millones de copias) · #1 durante 10 semanas · 173 semanas en lista y sigue (esta semana es #17)
- Los singles del álbum:
- ‘Grace‘ · 2 veces Platino (1,2 millones) · #9 · 42 semanas en lista
- ‘Someone You Loved‘ · 7 veces Platino (4,2 millones) · #1 durante 7 semanas · 169 semanas en lista
- ‘Bruises’ · 3 veces Platino (1,8 millones) · #6 · 54 semanas en lista
- ‘Hold Me While You Wait’ · 3 veces Platino (1,8 millones) · #4 · 34 semanas en lista
- ‘Before You Go’ · 3 veces Platino (1,8 millones) · #1 · 67 semanas en lista
Con estos datos sobre la mesa, y contando con que muchos temas del disco también han logrado certificarse gracias al streaming, era fácil pensar que a Lewis Capaldi le podía pasar como a muchos antecesores en el mercado británico (James Bay, James Morrison, James Blunt… básicamente cualquier persona llamada James) y pegársela de cara al segundo trabajo. Que los británicos son con los cantautores como son con la monarquía: hoy se te muere uno y ese mismo día ya tiene relevo.
Pero por ahora, Lewis Capaldi está sorteando los obstáculos del camino con su single de comeback, ‘Forget Me’. El tema apunta a #1 en el Reino Unido esta semana -a lo sumo cederá al #2-, y conserva aún el #1 en Youtube y los #2 en Apple Music y Spotify. Unos registros no demasiado habituales cuando se trata de un medio tiempo pop-rock más tirando a balada. Pero se conoce que le ha pillado el puntito Ed Sheeran al mercado de streaming.
Lo ha hecho también tirando de mucho morro y sin obcecarse en resultar intenso. No al menos en lo visual: el vídeo de ‘Forget Me’ tira de mucho humor cuando lo presenta como galán de diferentes estampas de finales de los 80. No faltan el piscineo, el flirteo a lomos de un caballo y el paseito por la playa como ‘Los Vigilantes De La Ídem’.
El vídeo acompaña a la campaña publicitaria que tuvo con anterioridad, donde podíamos verlo prácticamente desnudo para anunciar el single, bajo el lema “el sexo vende”. Un punto de diversión que, si bien desluce un tanto una canción que, dentro de todo lo genérica que suena, es bastante cuca, lo describe como una persona que no se toma tan en serio como cabría esperar de su papel.
Y no es mala estrategia: sin el éxito de su debut, pero parcialmente gracias a ese humor mantiene una carrera en activo aún James Blunt. Bien jugado, Lewis.