Shakira recibió anoche el MTV Taylor Swift Video Vanguard 2023 que reconoce toda su carrera videográfica (?) y celebró su catálogo como anteriormente se hubo hecho con Nicki Minaj (?), LL Cool J (?) o gente con una carrera videográfica realmente interesante.
Para ello, Shakira actuó en directo durante la gala. Y por actuó en directo nos referimos a que estaba allí presente, que de manera tangible uno podía ver a Shakira durante la emisión y, de estar en la arena donde se celebraba, podía incluso intuirla sobre el escenario. Más directo que ese no hubo.
Pero para compensar el hecho de que Shakira había editado las pistas de estudio cuatro tonos por encima de su voz real, añadiéndoles cuatro respiraciones y un par de elipsis para que alguien allí presente creyera que ese sonido de Mamá Pitufo colombiana salía de su garganta, la artista dio un show de los de quitar el hipo.
Contorsionó su cuerpo en un tunel para interpretar ‘She Wolf’, sacó los cuchillos durante el pequeño homenaje a ‘Ojos Así’, bailó bajo una lluvia de arena en ‘Hips Don’t Lie’ y la verdad, sirvió, sino voz, sí espectáculo para celebrar toda su discografía. Porque en cuestión de diez minutos escuchamos esos temas, pero también ‘Objection‘, ‘Whenever, Wherever’, ‘TQG‘, ‘Te Felicito’ y el final con la sesión de Bizarrap casi al completo. No os emocionéis con los berridos del público: posiblemente también iban pre-grabados si atendemos a que en ‘Hips Don’t Lie’, que iba remezclada, sabían exactamente cómo se había remezclado.
Pero lo dicho: Shakira sirvió un show bastante superior al que en su día entregó en la Super Bowl, dejando lucir sus orígenes, su perfil más rocky, su lado más urbano-latino y sus grandes momentos de pop. Una celebración en toda regla que seguimos sin tener claro si merecía más un MTV Icon que un Video Vanguard, pero que sigue representando un triunfo más para la industria latina. Una industria, por cierto, que tuvo bastante presencia este año entre la colombiana, Karol G y Peso Pluma.
