Si algo aprendimos de la última era de Shakira era que las mujeres ya no lloraban y las mujeres facturaban. Lo primero pues fenomenal, aunque cada uno y una que llore cuando le salga de la mismísima pituitaria, que libera mucho la verdad, y lo segundo… lo segundo lo ponemos más en duda con Shakira, porque si su facturación depende de este tour, ya os digo yo que la cosa le está saliendo a deber.

El tour está sufriendo tantos altibajos y cancelaciones que cualquier diría que la promotora la lleva la mismísima Mónica Naranjo. El último show que ha quedado pospuesto es el de Chile, que la cantante ha prometido cuando le vuelva a ser posible. El día que tocaba no lo fue, según la artista, porque el suelo del estadio donde iba su concierto no estaba nivelado:

“Cuando un artista viaja a un país, su producción y su equipo entran a depender directamente de los productores locales. Mi staff y yo confiamos en todo momento en que la productora contratada por el promotor local seguiria al pie de la letra las especificaciones que fueron diligentemente proporcionadas por nuestra parte para que se pudiera dar un show de la magnitud de este.

Desafortunadamente, nos hemos encontrado con que el suelo del lugar donde iría mi escenario está desnivelado y no se encuentra debidamente estabilizado para garantizar la seguridad de mi banda, bailarines, mis fans y la mía propia.

Hay dos cosas que jamás comprometería y es la seguridad de mi equipo y la de mis fans, y jamás les ofrecería un show por debajo de los estándares de calidad que ustedes merecen.”

No vamos a poner en duda las palabras de la colombiana, porque el estadio puede haberse desnivelado Dios sabe de qué forma en los últimos meses, pero bien es cierto que hace unos meses pasaron por allí Karol G, Iron Maiden, Luis Miguel o un festival de hard rock sin que hubiera mayores problemas. Y dudo bastante que, especialmente en el caso de Karol G, la escenografía del show fuera especialmente menos exigente que la de Shakira.

El próximo 30 de abril actuarán allí System Of A Down que, por mucha banda rock que sean, llevarán un importante despliegue de medios, con lo que está por ver si el nivelado del suelo mejora para entonces. Tampoco es que sea el primer problema al que se enfrenta Shakira durante el Las Mujeres Ya No Lloran Tour: tuvo que suspender el show en Medellín porque se le cayó el escenario, en Barranquilla no funcionó parte de la pantalla, en Bogotá tuvo que adelantar el concierto por lluvias, en Lima canceló por ponerse enferma, en Rio De Janeiro tuvo múltiples problemas técnicos… vamos, que no es a Shakira la haya mirado un tuerto, es que tiene delante al monstruo de El Laberinto Del Fauno.

Para compensar el despropósito de cancelar el show de Chile a horas de que tuviera lugar, la cantante salió a la puerta de su hotel, micrófono en mano -encendido, que durante este tour parece haber aprendido donde está el botón, que llevaba años con el apagado- y se ha animado a tocar Antología para los allí presentes. Un montón de gente agolpada en la vaya que si bien no compensa la cancelación, al menos sirve de recuerdo para ellos de haberla escuchado en directo.

Aún no hay fechas para Shakira en España, pero id cogiendo vuestros mejores amuletos y vistiéndoos con vuestros mejores collares anti-gafe si queréis llegar a verla en algún momento. El suelo de los recintos no sé, pero el de esta gira está que parece sita en mitad de la falla de San Andrés.

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