Menos mal que Shakira no tenía en mente un disco para estos meses, porque de haberlo tenido, posiblemente le hubiera quedado tal mejunge de géneros que, a su lado, ‘El Dorado‘ hubiera parecido cohesivo. Su tracklist hubiera lucido ‘Greatest Hits’, considerando que en apenas meses la hemos visto en clave disco-pop, bachata, reguetón, EDM, baladista y ahora también haciendo regional mexicano. Otra cosa no, pero es cierto que Shakira sabe montarse en la tendencia cuando la tendencia está en buen momentum. Como Madonna antes de ponerse el horario canario en el Apple Watch.
‘El Jefe’, como decíamos, es bastante más folclórica que sus propuestas más recientes. Ha contado con la colaboración de Fuerza Regida, que se hacen cargo de la mitad del tema, y ha decidido que ya que se pone a hablar como la gente de la calle, va a tratar también los temas de la gente de la calle. Ella habrá defraudado millones a Hacienda, pero que no haya pagado los impuestos que ayudarían a miles de personas a tener mejor vida no implica que no esté interesada en que miles de personas la tengan. Simplemente le apetece que sea con el dinero de otro. ¿Por qué no iba Barei a pagar, por ejemplo, por facilitar educación, sanidad y mejoras salariales a esa gente? ¿Tiene que ser ella quien lo haga? ¿Le puede no apetecer? Ella ya entregó ‘Inevitable‘, ahora es momento de que otros hagan algo por la sociedad.
En ‘El Jefe’, lo de ‘El Jefe’ es literal: Fuerza Regida y Shakira hablan de las diferencias sociales y la explotación laboral. De pronto una es Ismael Serrano con el culo sentado en un cactus. Call her Amparanoia. No habíamos visto tanta implicación social en Shakira desde que en ‘Loca‘ denunciara los peligros de la economía del lenguaje al cantar “se colan lo’ ra-ta-ta, no te ponga’ bruto, que te la bebe”. La RAE reaccionó con absoluta inmediatez diciendo “efectivamente“. Y por la RAE nos referimos, por descontado, a Carly.
Volviendo a ‘El Jefe’, por supuesto que Shakira ha querido dar al programa de dieciséis minutos de Sandra Barneda algo de lo que hablar, y ha incluido una puyita a su suegro en mitad de la letra: “Dicen por ahí que no hay mal que más de cien años dura, pero ahí sigue mi exsuegro que no pisa sepultura“. Bueno, amor, igual si ya estamos hablando de que se muera tu suegro tenemos que saber dónde parar. Una referencia está graciosa, dos simpáticas, tres se hacen rutina y a la cuarta igual ya se nos ha ido la olla.
La telenovela de Piquira también se deja ver en ‘El Jefe‘ con la participación de la niñera de sus hijos, Lili Melgar, a quien la cantante dedica la canción porque, dice ella en el tema, no recibió la indemnización tras ser despedida. Colombian Robin Hood: ella roba a Hacienda para dárselo a… su productor y que haga un tema profundamente social.
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Será tu rollo si: te gusta escuchar regional mexicano como quien disfruta de la comida mexicana porque va a un ‘Taco Bell’, has fundado un sindicato, recuerdas a MIriam Saavedra cantando “cómo se mata al gusano”.
