Fantasía en la plaza del pueblo. En un pueblo italiano. Al pie de las montañas. Bueno, lo de las montañas da igual, aunque bien es cierto que el perfil de gente bailando ‘Duecentomila Ore’ en la plaza bien podría ser el de la madre de Marco. Si la madre de Marco fuera una señora de 80 años esperando a que la orquesta toque su pasodoble favorito. Y es que si nuestro chotis favorito siempre será ‘Si Te Marchas’ de Merche, nuestro pasodoble favorito ha pasado a ser el nuevo single de Ana Mena.
El single con el que la cantante de Malága, provincia de Italia, ha participado en el Festival de San Remo sin especial éxito en la primera serata, donde ha terminado 12ª de doce canciones. La pobre tampoco ha tenido la culpa, su directo ha sido correcto pero era muy complicado que la orquesta que toca allí en directo consiguiera llevar a su sonido el sonido de ‘Duecentomila Ore’.
Porque la canción de estudio suena un poco a organillo. Un poco a ‘Tu Es Foutu’ de In-Grid y un poco a banda sonora de película italiana de 1950 que por algún motivo se samplea en un single de Freemasons de 2009. Y claro, al llevar eso al directo, Ana Mena se ha encontrado con demasiado organillo, con la impresión de que sólo le faltaba una cabra al lado bailando encima de una silla mientras un arlequín entretiene al público presente. Un poco un circo, las cosas como son. No es de extrañar que la artista apenas abriera los ojos durante la performance. Eso o es que, además de un homenaje a Italia, era todo un homenaje a Pekín.
La buena noticia es que ‘Duecentomila Ore’, además de alegrar a las viejas de algún pueblo napolitano esperando encontrar pareja entre baile y baile, alegrará también los corazones de los fans de Ana Mena con su vídeo oficial: la artista intenta enamorar a un muchacho que fuma más que Marisa en ‘Aquí No Hay Quien Viva’ y para cuando el muchacho se interesa, termina dejándolo plantado como a Belén, de ‘Aquí No Hay Quien Viva’.
