Un año más, los Premios Ondas se han entregado. Los Ondas, para que os hagáis una idea, son premios que tienen en nuestro país tanto prestigio como olor a Brumel. Da la sensación de que para asistir a una gala hay que haberse leído el María Moliner, acudir con chorreras y procurar no lucir Rosa López en Eurovisión 2002 una vez colocadas las mismas. Después, uno de sentaría en mesitas alumbradas por una lámpara de aceite mientras alguien lee el listado de premiados en papiro desde una tarima decorada con pesadísimas telas de color bermellón. De fondo, aplaudiría el público de ‘Tardear‘. Os hacéis a la idea ya.
Vamos a centrarnos en los premios musicales de este año, aunque el titular de 2024 es que le han entregado el Ondas a ‘La Revuelta‘ a un mes de haber arrancado, por lo que cuando pensaron en dárselo, aún tenían la placa escrita con el nombre de ‘La Resistencia’ más que posiblemente. Va, me centro en lo nuestro.
Premio Ondas a la trayectoria (Ex aequo): Estopa y Los Chichos
Este año, el Ondas a la trayectoria ha quedado dividido en dos premiados, porque existía una urgencia extrema por premiar a Los Chichos y dijeron: no, nos montamos un ex-aequo porque cómo no íbamos a premiar a Los Chichos en 2024. Pero claro, premiando a Estopa con el galardón a la trayectoria por sus 24 años, casi que quedaba bien premiar a unos de sus referentes por sus más de 50. Hubieran hecho pleno si hubieran premiado también a Melendi y así todas las versiones de Estopa hubieran sido galardonadas.
Estopa arrancaron una carrera de éxito en 1999 y desde entonces nunca han cedido demasiado terreno: incluso en una lista de ventas súper enfocada en el streaming como la actual, su último álbum, ‘Estopía‘, ha sido certificado Oro. Pocas bandas del país pueden presumir de tal salud con tanto recorrido a espaldas. Que se le lo pregunten, si no, a Tess.
Los Chichos se formaron en 1973, pero desde entonces han tenido tantos tipos de formación que básicamente son los Sugababes de la rumba en España. El último recopilatorio del grupo se publicó en 2014 -el último álbum en 2008-, pero este mismo año DJ Nano ha remezclado uno de sus mayores hits, ‘Ni Más Ni Menos’, fingiendo acercarlos a un público joven.
Premio Ondas Especial del jurado: Manuel Alejandro
Siempre a favor de que los Premios Ondas se entreguen en vida y sirvan de merecido homenaje: Manuel Alejandro lo recoge a los 92 años como autor de muchísimos hits de la historia española, como ‘Todo De Ti’, ‘Beso’ o ‘Baby Hello’ los del catálogo de Rocío Jurado (‘Se Nos Rompió El Amor’, ‘Señora’, Como Yo Te Amo’…), los de Raphael (‘Que Sabe Nadie’, ‘Yo Soy Aquel’, ‘Digan Lo Que Digan’…), amén de temas para Alejandro Sanz, Luis Miguel, Marisol, Jeanette… en fin, absoluta historia de nuestro pop.
Manuel Alejandro es para tus padres o abuelos lo que para tí ir a un karaoke a entonces hits de la época Vale Music. Solo que con canciones decentes. Ya no tiro del clásico de “que aguantan bien el paso del tiempo” porque no voy a discutir la eternidad de algo como ‘Brisa De Esperanza’, pero ya me entendéis.
Premio Ondas a fenómeno del año: Ginebras
Yo con este Ondas tengo un problema, que os lo expongo anualmente para ver si alguien me hace caso alguna vez, pretendiendo que el señor que decide las categorías de los Ondas fuera a llegar a este post, como yo leer algo de Boyero sobre la última de Iciar Bollaín. Simplemente no va a ocurrir, pero yo insisto: no entiendo el título “fenómeno del año”.
Es decir, el “fenómeno del año” te compro que haya sido algo que ha estallado durante los meses de entrega del premio. Un locurote generalizado que decides galardonar. Pero… ¿Ginebras? Ginebras es una banda bastante asentada en nuestro panorama. El único festival en el que no han tocado el último lustro es el de la OTI. Entonces, ¿no sería mejor simplemente entregar un Ondas al mérito musical o algo similar?
En cualquier caso, más que merecido caballito de arcilla que debe ser dificilísimo de colocar en una estantería de casa porque tiene un tamaño inapropiadísimo, para una banda que ha refrescado muchísimo al indie, nos ha traido de vuelta un mood noventero positivista, generacional y colorido. Y nos ha venido de perlas para dar saltos, berrear los lyrics vaso de cerveza en mano y cambiarnos el tinte cada quincena.
