Cher es, junto con Geri Halliwell, la mayor vendedora de bullshit de la historia. Sólo que Cher es magníficamente autoconsciente y emplea todas sus armas para dejar claro que ella suelta sus speeches publicitarios y promocionales sin creerse una mierda de lo que está contando. Es parte del icono que es, ese saber comunicar al mismo tiempo lo que el público quiere oir, lo que la discográfica quiere escuchar y el mensaje entre líneas más a la vista del mundo.

En el anuncio que se ha marcado para la salida de su nuevo álbum, ‘Christmas‘, Cher sabe que está diciendo una sarta de memeces. Y en vez de tomarse en serio, decide hacer una absoluta pantomima del tráiler. Empezando por la primera de las frases, en la que su entrevistador le pregunta qué es lo que la motivó para grabar un disco navideño. “La discográfica”, responde ella sin cortarse un pelo.

A Cher se la barniza todo. A dos capas. Cher es básicamente la mejor madera de roble con una anchísima capa de barniz transparente cayéndole por encima. Tiene los ovarios de comentar que “no quería hacer un disco de Navidad usual” y no quería interpretar las canciones “como las conozco, como las he oído”, mientras suena de fondo una versión de ‘Christmas (Baby Please Come Home)’ que no puede ser más tradicional.

Le sigue un ‘Santa Baby’ bastante literal también, mientras Cher comenta que “disfrutó mucho de su grabación porque le puso muchas voces distintas” y que “la interpretó”. Amore. Es literalmente la versión de cualquier cantante pop que se publica año tras año. Véase Kylie, véase Ariana. Pero es que Cher es tan consciente de ello que es divertidísimo verla decirlo sin apenas parpadear. Si es que pudiera hacerlo, en realidad.

“Cuando estás así de emocionada con algo, coges tus limitaciones y las dejas a un lado”, comenta Cher apenas unos segundos después de explicarnos que ha grabado este disco a petición del sello. Menuda fantasía. El vídeo cierra con ella contando que “nunca ha escuchado tanto un disco suyo como ha escuchado este”. Ella, que huye continuamente de sí misma, de escucharse y verse, ha tenido en bucle un disco de Navidad que se la trae al pairo, claro que sí. No nos queda ninguna duda.

Dice Cher que el día que llamó a Stevie Wonder y él le dijo que sí a colaborar en su disco, se subió a la cama a dar saltos de alegría diciendo “¡Stevie Wonder va a cantar en mi álbum!”. La honra tener aún ese punto de fan -y es cierto que le ha versionado en multitud de ocasiones-, pero amor: eres Cher. No es como si Miriam Rodríguez le pidiera colaborar y hubiera dicho que sí. Eres la bendita Cher. Antes de ti, la música no tenía siquiera letra, eran señores egipcios dibujando pájaros y esfinges.

“Es todo muy loco, así que es muy yo”. Mira, en eso tiene razón. Empezando por este anuncio, que es oro molido segundo tras segundo.

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