Que si lo pensáis, es fuerte hablar de Ana Guerra en 2024 (pero ya he explicado que lo merece más que en 2018), pero más fuerte aún es hablar de David DeMaría. Es fuerte hablar de David Demaría sin tener en la web una sección de obituarios. Sin tener que llamar a Rosa María Cobo para que ejerza de medium. Sin tener que exhumar La Almudena en busca del cuerpo. Pero aquí estoy, hablando de él porque ha lanzado, como Ana Guerra, un dúo con Chenoa.

Y siendo Chenoa el icono atemporal que es a pesar de sus continuos esfuerzos por no resultarlo, he decidido ver si el dúo con la triunfita o el dúo con el cantante de ‘Que Yo No Quiero Problemas’ ha resultado mejor. No voy a manteneros en tensión: lo de Ana Guerra se come al otro dúo. Devora. No hay batalla realmente, pero voy a justificarlo.

‘Me Quiero Más A Mí’ tiene ese punto que Ana Guerra ha encontrado para sí mismo que suena un poco como si Abel Tesfaye trabajara de becario en Cadena Dial y se hubiera tomado un somnífero. Y ojo, digo esto como cumplido, aunque suene así de raro. Es lo suficientemente moderna como para esquivar el lache, lo suficientemente melódica como para no irse de madre y sigue el hilo del camino que Ana se ha ido marcando. ¿Y Chenoa como encaja en todo esto? Pues fenomenal, porque es una canción guerrera y ella le pone la garra. La canta con fuerza, la hace suya. Ahí asoma la Chenoa que se cambia el micrófono de manos sin miedo a que el público en la plaza de turno no entiende semejante osadía. Es la Chenoa que aún planta batalla y que lleva unos años ausente de Spotify, aunque presente en los conciertos. Dios sabe qué la impulsa a dejar ese ‘yo‘ fuera del estudio. Ana Guerra ha salido del mismo, lo ha empujado a la cabina y, por fin, ha asomado la patatita.

En ‘Relatividad‘, todo lo contrario. Ese ‘yo‘ de Chenoa se ha quedado inconsciente fuera del estudio después de que David Demaría apareciera como un Dementor y absorbiera de ella cualquier capacidad vital. Lo habitual, por otro lado. Lo ha hecho incluso consigo mismo. ‘Relatividad‘ suena a descarte de la Rosario Flores de 2006, pero compuesta utilizando muchas palabras esdrújulas, mucha rima con ‘-ente‘ y cerrando el estribillo con algo tan sumamente insustancial, vacío y de cantautor dosmilero como “el tiempo pasa lentamente (…), siempre indiferente, producto de su relatividad”. Producto de su relatividad. Ojo. Albert Einstein fue encontrado muerto tras estos lyrics. En realidad fue encontrado muerto el 18 de abril de 1955, pero porque ya vaticinó que este dúo ocurriría.

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