Mientras vivieron columnas construyeron, y ahora muertas, lo que construyen es el disgusto de más de un seguidor. Las Bistecs anuncian su separación de manera oficial, con lo que no, amigos, no tendremos una nueva dosis de ‘Oferta’ en los meses venideros. Su primer álbum quedará como el único de su discografía porque Carla y Alba han pulsado el stop en el cassette del electrodisgusting, y lo han hecho a golpe de comunicado en redes sociales:
“Queridos Entrecots,
Las Bistecs han llegado a su fin. Queremos dar las gracias a los que nos habéis escuchado y a todos los que habéis colaborado con nosotras estos 4 años, porque sin vosotros la indústria electrodisgusting se iba a la mierda. La caspa en España sigue esparciéndose al mismo ritmo, y siempre hay material nuevo para criticar. Por eso, os animamos a salir al escenario a reivindicar lo que os salga del ANO.
Destruir es mejor que crear. Besos, Las Bistecs aka @carlaparmo @albarihe@driagil
Un abrazo también a nuestros fans transoceánicos!”
Señoras mal, señoras fatal. Es cierto que lo bueno, si breve, dos veces bueno, pero había algo en el pop absurdo de la banda que resultaba fascinante, amén de colar más de una reivindicación en sus letras, como quien no quiere la cosa. Como diría Noemí Argüelles, “digo pocas cosas, pero yo creo que se me entiende”.
También es cierto que el grupo no daba señales del vida desde el pasado diciembre, cuando ya anunciaba con un concierto en Razzmatazz que “no les veríamos mas el pelo”. Y así ha sido, Las Bistecs se van, y lo hacen a su manera: pidiéndole a la gente que salga a reivindicar lo que le salga del ano. Culo en castellano. La canción del verano.
