Chicas al poder en la calle y en los Goya. Cuatro fueron las invitadas para actuar en la gala, y todas ellas hicieron fantásticas actuaciones anoche, cada una dentro del género que maneja. Acompañadas por la Orquesta Sinfónica de Málaga y rodeadas de un escenario que se adaptaba a las mil maravillas a cada propuesta, las cuatro pusieron el punto de emoción a una gala sobria y bastante acompañada de música.
Vanesa Martín se encargó del in memoriam, en la que fue posiblemente la actuación más correcta de las cuatro, aunque siguiera estando bastante a la altura. Para el momento de recordar a los que se han ido, se eligió ‘Una Nuble Blanca’ de Ana Belén, que Vanesa interpretó con gusto, vestida de blanco en medio del escenario en la que fue la actuación más larga de la noche.
Y decimos que fue la más correcta, porque el resto fueron de auténtica altura: Diana Navarro homenajeó a Luis García Berlanga con ‘Coplilla De Las Divisas’ (aunque todo el mundo reconozca el como ‘Americanos (Os Saludamos Con Alegría)’), acompañada en escena por un Carlos Latre que hizo una intro fabulosa imitando a Pepe Isbert, aunque después entorpeciera más que otra cosa a Navarro, una vez cogido el ritmo de la canción. Ella, espléndida y muy en el papel de folclórica que tan bién borda, lució muchísimo.
Nathy Peluso apareció en el escenario para entonar ‘La Violetera’ de Sara Montiel y aquello fue la actuación de la noche. Rebajando su habitual histrionismo vocal, aunque manteniéndolo en el punto justo también, la cantante hizo totalmente suyo el clásico y fue un auténtico imán audiovisual en el escenario. Demostrando que además de manejarse bien en el urbano puede dar actuaciones magníficas como vocalista, Peluso fue sexy, emocionante, intensa e incluso divertida aún sin pretenderlo. El pack completo.
Aitana fue la única que cantó en inglés en la gala. La elección del tema de Barbra Streisand podía chocar visto que celebrábamos el cine español, pero se había elegido porque la actriz americana la había dedicado en su mensaje previo para la gala. Y Aitana estuvo fantástica. Muy elegante y vocalmente muy bien medida, fue ganando en intensidad según la canción avanzaba. Además, la escenografía que la acompañó era absolutamente espectacular y envolvía el mensaje del tema mucho mejor.