El pasado viernes, Taylor Swift lanzaba su nuevo álbum, ‘Reputation’, con la premisa de ir a arrasar en ventas, a pesar de que ninguno de los singles que había lanzado hasta ese momento daba el suficiente colchón al disco, más allá del smash inicial que fue ‘Look What You Made Me Do’, que tardó poco en perder prácticamente todo el fuelle.
Con las cifras en la mano, y a sabiendas de que Taylor Swift tenía casi 400.000 pre-orders del álbum ya bajo la manga, ya sabemos que su nuevo disco quedará muy lejos del fracaso. Sin sorpresas. Eso sí, lo que sorprende es ver lo altísimo de su resultado, como decíamos, a pesar de que ningún single esté dando alas al proyecto: en sus primeros tres días a la venta, 925.000 copias del álbum se han despachado ya, acercando a Swift a ese posible resultado de 1,4 millones de arranque que algunos medios le vaticinaban.
Posiblemente se quede algo corta, pero ha sido a decisión propia: el disco no está disponible en las plataformas de streaming, lo que hará que esas ventas que podía arañar ahí se queden en el camino. También es verdad que el equipo de Swift sabe muy bien dónde se mueve: las cifras de streams de Swift en Spotify este 2017 habían sido francamente decepcionantes, así que han puesto todos los esfuerzos en vender el disco, dejando su escucha online para más adelante, cuando busquen un trayecto a largo plazo por las listas.
Una táctica inteligente, que sin embargo, tiene ahora un trabajo duro en adelante: ¿cómo irá la segunda semana de Swift en las tiendas? ‘1989’ pasó de 1,2 millones en su estreno a 400m unidades en la segunda semana: ¿conseguirá la cantante perder sólo esos dos tercios de sus ventas o estarán sus cifras infladas por los fans que han ido con urgencia a por el disco?
Una cosa sabemos ya: ‘Reputation’ caera, al menos, medio millón de una semana a otra, porque perderá el impacto de sus pre-orders, pero estará por ver si lo compensa con nuevos compradores. No en vano, el disco se ponía a la venta en edición normal, pero también con dos revistas sobradamente publicitadas por la artista, dividiendo a sus compradores y multiplicando resultados.
Con las cosas así, ‘Reputation’ arrasa sin vacilaciones, pero tiene un trabajo duro por delante si quiere alcanzar el status de ‘1989’. Para empezar, el de dar un single capaz de retener a gente más allá de su entusiasta fanbase: su último corte promocional, ‘…Ready For It?’ apenas es top20 del iTunes de una decena de países, y eso teniendo en cuenta que sus resultados están inflados por el lanzamiento del álbum.
¿Cederá Taylor a los streams la semana que viene y llegará a todas las plataformas? ¿veremos una caída fuerte de ‘Reputation’ o mantendrá los datos? Y otra cosa a tener en cuenta: ¿seguirá contando con el público internacional o volverá a centrar su éxito en Estados Unidos? Habrá que esperar al menos un par de semanas para descubrirlo.
