Que Kanye West es imbécil y más aún a través de las redes sociales que jamás aprendió a utilizar con sentido común, tampoco es que sea ahora el breaking new que vaya a abrir los informativos de hoy. Ahora bien, que una de sus imbecilidades le haga perder casi 10 millones de followers a través de Twitter sí que es algo más significativo y digno de ser comentado. Sospechosamente, el rapero ha ido recuperándolos a lo largo de la noche.
¿Y qué ha hecho Kanye para marcarse semejante anti-gesta? Pues básicamente un Shania Twain, pero sin que anduviera falto de contexto, sin estar con la guardia baja o sin dar una respuesta que le resulte “incómoda”: Kanye West ha vuelto a posicionarse a favor de Trump en redes sociales a escasos meses de sus nuevos proyectos. Ojo, no ya un nuevo álbum para sí, porque eso al final sería algo que sólo le afectaría a él; es que West está trabajando en un álbum conjunto con Kid Cudi, en lo nuevo de Nas o en el debut de Teyana Taylor, por ejemplo, con lo que podría poner todos los lanzamientos en peligro.
En cualquier caso, Kanye parece despreocupado y la movida arrancó con una foto suya vistiendo la gorra de “Make America Great Again” que le había llegado firmada. El rapero arrancaba con uno de sus clásicos rants afirmando que Obama no había hecho nada por Chicago en 8 años, que Trump esto y que Trump lo otro, y soltaba una retahíla que iba espantando a un montón de seguidores, incluyendo un buen puñado de famosos: Katy Perry, Kendrick Lamar, Justin Bieber, Rihanna, The Weeknd o Nicki Minaj han dejado de seguir al rapero.
La única que parecía tratar de poner algo de sentido común en el asunto era Kim Kardashian, que instaba a Kanye a dejar claro que no estaba a favor de todas las decisiones de Trump.
“Mi mujer me ha llamado y me ha pedido que aclare esto a todo el mundo. No coincido con todas las opiniones de Trump. Sólo estoy 100% de acuerdo conmigo mismo.”
Ella, por cierto, también aprovechaba para criticar que los medios tratasen los comentarios de West como “problemas mentales”, afirmando que él siempre había sido un boca-chancla y que cada vez que alguien discrepase con la opinión general, no podía venderse como una “enfermedad mental”. Lo cierto es que, dentro de todo este grado de estupidez, punto a favor para Kim K.
Y claro, el movidón no ha tardado en marcarse la primera víctima oficial: Scooter Brown. El manager de Kanye ya no lleva al artista, que ha confirmado en redes sociales que es es así.
Claro que Kanye no deja de ser Kanye, y, horas después, se ha marcado un Las Chuches afirmando que “le encantaría contar con Brown en sus próximos proyectos”. Bueno, a él sí, pero algo nos dice que Scooter lo mismo no está ya tan por la labor de acompañarlo.
En fin, veremos si estas últimas polémicas afectan al funcionamiento de los próximos álbumes de Kanye, previstos para junio, o las cosas vuelven a irle bien como en ‘The Life Of Pablo’, que ronda el millón y medio en Estados Unidos y tiene 6 singles certificados Platino sin haber recibido nada de promo ni estar siquiera a la venta en formato digital o físico.
