¿Recordáis a Melanie Martínez? Probablemente no, porque cuando salió su primer álbum, acababa de volver a decretarse el alcohol como algo legal en Estados Unidos. De aquello ha llovido mucho, pero la artista puede presumir de unos datos de streaming que por aquella época no significaban tanto. Pero ahora sí. Y la única concursante de éxito salida de ‘The Voice’ tiene media docena de temas de su debut rondando los 100 millones de escuchas. Ahí es nada. Y eso que, en aquel 2014, ninguno de sus singles llegó a pisar Billboard.
Un lustro después, está por ver si la magia de Martínez sigue intacta con su segundo proyecto, ‘K-12’. El “disco”, porque el concepto tiene su miga, se publicará el 6 de septiembre acompañado de un largometraje dirigido y protagonizado por ella misma. Y por descontado, siguiendo su estética de niña pera, porque se conoce que todas las Melanies de a partir de 1980 tienen ese mismo problema.
La película llegará acompañada de un puñado de canciones, claro está. Y la artista las lanzará en formato de vinilo, cassette y CD, acompañadas del film en cuestión. ¿Cuál es el problema en todo esto? Pues que Melanie Martinez se puso a promocionar el asunto allá por 1982, coincidiendo con el debut de Madonna.
Desde entonces, hemos visto teasers, tráilers, teasers de tráilers, tráilers de teasers, sneak peeks, peak sneeks, escenas inéditas, escenas en exclusiva, películas de 8mm, grabaciones en móvil de eventos secretos… vamos, que prácticamente hemos visto la película antes de su estreno, porque es imposible que el material diera para tanto adelanto.
Y preparaos, porque os recordamos que aún queda mes y medio para el lanzamiento. Hasta el 6 de septiembre, podríamos ver cuarenta planos más de picnics, efectos de ‘Matilda’ y pelucas bicolor.
