Actualidad

A RTVE sólo le ha faltado sacar a Melani en pañales para anunciarla como representante de Eurovision Junior

A RTVE sólo le ha faltado sacar a Melani en pañales para anunciarla como representante de Eurovision Junior

El próximo 24 de noviembre España vuelve a Eurovisión Junior, después de más de una década de ausencia del Festival. El país puede votarse a sí mismo en el Festival, y considerando que la última edición no sobrepasó los 3 millones de audiencia en toda Europa, complicado será que no repita el resultado de María Isabel en 2004, cuando se coronó ganadora con ‘Antes Muerta Que Sencilla’. 

En cualquier caso, España siempre ha cosechado buenos resultados en Eurovisión Junior: Sergio y Antonio José quedaron segundos, y Dani Fernández tuvo el peor resultado de todos en 2006, y aún así cerró cuarto. Veremos pues qué ocurre con el comeback de este año.

Por ahora, de lo que ya podemos hablar es de que Melani García, concursante de ‘La Voz Kids’ es la representante elegida por RTVE, que se lo ha hecho saber de una forma un tanto peculiar. La cantante estaba llamada a una entrevista en el programa de Máximo Huerta ‘A Partir De Hoy‘, y allí, en pleno directo, le han comunicado que ella será la representante. La muchacha ha comenzado a llorar, se ha abrazado a su madre y al presentador, y ha comentado que «ir a Eurovisión era su sueño desde pequeñita».

Y claro, Máximo Huerta le ha preguntado: «¿desde pequeñita? ¿pero cuántos años tienes?». Doce años. Melani tiene doce años, con lo que de pronto, lo comentable ha sido el atuendo con el que la han paseado por la televisión pública: con un tocado infantilísimo en la cabeza, un vestido igual de infantilón y… erm, un oso de peluche en la mano.

Al parece, el oso de peluche es una especie de amuleto para la artista, pero… tiene doce años. Oye, que allá cada cual, pero si nos preguntáis por nuestra opinión, y para eso estáis leyendo esto y no ElPaís, diríamos que el esfuerzo por hacerla parecer más niña es un tanto enfermizo. Da la impresión de que se quiera alargar su infancia para seguir presentándola como niña prodigio, cuando la realidad es que es una adolescente.

Evidentemente, cada cual que se vista y lleve los muñecos que quiera, faltaría más. Pero vista la escenografía, parece que sólo les ha faltado sacarla con un biberón a cuestas para que las abuelas desde casa puedan decir «que niña tan mona» y siga siendo una fuente de ingresos para la familia, en clave ópera-pop. Nos da un poco de mal rollito. 

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies