Ayer sobre el mediodía una noticia sacudía al país: La Oreja De Van Gogh anunciaba la salida de Leire Martínez de la banda. Lo hacían con un escueto comunicado y de forma unilateral, haciendo que, de inmediato, saltaran las alarmas de seguidores, fans y periodistas que siguen el mundillo pop.
Por eso, voy a intentar ordenar un poco la sucesión de acontecimientos que, en apariencia, llevan al comunicado a ayer a mediodía y que aclaran, en la medida en la que me es posible, el rumor de comeback de Amaia Montero a la banda. Porque no, de primeras, Amaia Montero no vuelve a La Oreja De Van Gogh. No de una forma definitiva.
La casilla de salida: el comeback de Amaia Montero
Han pasado seis años -casi siete, ya- desde que Amaia Montero publicara su último álbum de estudio, ‘Nacidos Para Creer’. Un álbum que pasó 18 semanas en la lista de ventas, fue #1, pero volvió a suponer pérdida de público para la cantante, que venía de las 30 semanas de ‘Si Dios Quiere, Yo También’ unos años antes. Durante la gira de ‘Nacidos‘, Amaia Montero sufre de notable inestabilidad emocional y cae -entiéndase el eufemismo- malita.
Durante años, Amaia está casi desaparecida pero en 2022, prácticamente en la misma fecha de hoy, comparte en Instagram unas imágenes y textos tremendamente preocupantes que disparan todas las alarmas. Lo hace días después de compartir una nueva canción que, a todas luces, parecía anunciar un comeback inminente.
El problema es que el comeback de Amaia Montero no es tan sencillo de gestionar si uno quiere que salga redondo. Amaia necesita un bang. Amaia necesita lo que en Estados Unidos sería un ‘Oprah‘ y que en España, a falta de formatos de impacto similar, pasaría a ser un momentum. Una situación que la coloque en la mente de todo el mundo. Que fije su reaparición en el imaginario colectivo. Un concierto evento.
En ese mismo instante, cuando se plantea esa idea, la salida de Leire de La Oreja De Van Gogh empieza a arrancar sin que ni siquiera la protagonista sea consciente.
Amaia Montero aparece con Karol G
A finales del mes de julio se hace un testing de la situación: aprovechando el paso de Karol G por España y el hecho de que la artista invitara, por norma general, a artistas a acompañarla en un momento del show del ‘Mañana Será Bonito Tour’, sube Amaia Montero al escenario a cantar rosas. El momentum funciona, queda comprobado.
El público presente en el Santiago Bernabéu no da crédito, corea con todas las fuerzas el himno de La Oreja De Van Gogh y todo cumple los tres objetivos marcados: presentar a Amaia renacida (un poco en la misma clave Britney Spears tras ‘Blackout‘: guapa, sofisticada, profesional), convencerla a ella de que el público la quiere de vuelta y convencer al público de que la necesitan de vuelta.
Una gota final está a punto de colmar el vaso de Leire Martínez.
Propuesta de reunión a La Oreja De Van Gogh
Visto el éxito de la reaparición junto a Karol G, continúa la maquinaria para, recordemos, el comeback en solitario de Amaia Montero. En solitario. La siguiente propuesta llega a la mesa del grupo después del show de la colombiana: se propone, durante esos meses de verano, a La Oreja De Van Gogh reunirse para un concierto especial en el que Amaia Montero será su cantante. Desconocemos la localización, pero imaginamos que, siendo una ocasión única -que después serán más, veréis-, será un concierto de escala Santiago Bernabéu.
La propuesta incluye un requerimiento clave: Leire Martínez no puede estar en el escenario con sus compañeros. El concierto debería ocurrir sólo con Amaia y los músicos de la banda. Recordemos, de nuevo, que la estrategia está pensada para lanzar después un disco de ella.
La Oreja De Van Gogh empieza a plantearse hacer un paréntesis tras el final de la gira que ya tienen firmada con Leire, llevar a cabo ese concierto y después continúar con Martínez su andadura cuando Montero publique su nuevo trabajo. El show se plantea como un momento puntual en mitad de las agendas de todos ellos.
Leire aparece en la televisión navarra
A mediados de septiembre, Leire Martínez aparece en la televisión navarra. Lo hace después de que Isabel Rábago, antes inclusc del show de Karol G y Amaia, asegurase en Telecinco que Montero pretendía volver a La Oreja De Van Gogh. Era un long shot, pero no estaba tan equivocada como pensábamos: las cartas ya estaban sobre la mesa de ambos, aunque nada fuera seguro.
Cuando Leire se sienta en ‘Cara A Cara’, todo el mundo supone que lo hace por la reparición de esos rumores. Pero revisitando ahora sus palabras, queda más claro que la propuesta del concierto ya estaba siendo valorada por el grupo. Leire Martínez no está enviando un mensaje al público, se lo está enviando a sus compañeros. “A mí que se diga que vuelve Amaia no me afecta, lo que no me gusta es que se me ningunee a mí”.
Veámoslo desde esta perspectiva: La Oreja De Van Gogh iba a dar el sí al concierto más importante de su carrera, el más masivo. Pero lo harían sin la que ha sido su cantante principal, sino con la anterior, que había abandonado hace casi 20 años. Para después, retomar agenda con Leire en eventos más pequeños, más habituales.
Martínez se siente, como es lógico, como un stick-stack que sirve para quitar y poner según la situación lo requiera.
El concierto de fin de gira
Y llegamos al mes de octubre. Leire tiene que cerrar la gira de conciertos que ha servido a La Oreja De Van Gogh para reavivar la chispa y conexión que tiene con el público. Los medios vuelven a abrazarlos como hacía años que no lo hacían y su catálogo, que ya era masivo de toda la vida, queda expuesto como uno repleto de himnos no solo para el público -que ya decimos que los corea desde 1998-, sino también para los periodistas, más reacios, históricamente, a abrazar este hecho sin complejos.
Hace apenas unos días, vuelven a saltar las alarmas de los fans cuando los vídeos del último show de La Oreja llegan a redes: se puede ver a Leire visiblemente emocionada al interpretar ‘Rosas‘. Algo que sería normal en un cierre de gira, pero quizás no tanto con la angustia que se intuye en sus lágrimas y gestos. Al final, el momento es emocionante pero no debería ser triste. Y sin embargo, en el vídeo de la performance solo se lee tristeza.
Falta apenas un día para que el grupo detone la bomba: Leire se sabe fuera y se está despidiendo.
El comunicado
Breve. Conciso. Casi impersonal. Un comunicado de pocas palabras rompe la relación entre La Oreja De Van Gogh y Leire Martínez el 14 de octubre. Lo hace, ojo, sin que ella comparta el comunicado, publicándose solo en las redes de la banda. Una banda que, si atenemos al texto que escribe, no considera que Leire sea parte de ella. El tono es prácticamente de asalariada que abandona la empresa. Y el backlash de los fans es inmediato.
Aclaremos algo: Leire es la que sale del grupo, no es que la eche. Lo que no se hace es invitarla a quedarse. La Oreja decide llevar a cabo el plan establecido, el de finiquitar la gira con Leire y aprovechar el paréntesis para realizar el concierto de Amaia. Pero las cosas salen mal, Martínez no pasa por el aro y su negativa a continuar después del macro-concierto con el grupo la hace salir.
Una decisión, a todas luces, lamentable: en la situación actual de La Oreja De Van Gogh se podía haber planteado un Bernabéu con Leire. Lo hubieran llenado. Pero de nuevo, no perdamos de vista el objetivo de todo este plan: el nuevo disco de Amaia en solitario.
Las reacciones de Leire y Amaia
Llama poderosamente la atención que una banda que históricamente ha sido del todo unproblematic, haya resuelto esta situación de forma tan chapucera y confrontante. Leire Martínez apenas tardó unas horas en confirmar a una amiga periodista que ella “no había firmado el comunicado” y que “cuando se encuentre bien, ella misma contará lo que sea”. El tono, de nuevo, da a entender que Leire no consideraba la conversación con el grupo por finalizada, pero ellos sí. Y se adelantan a su vocalista zanjando su relación para poder llevar a cabo el planning.
Amaia Montero reacciona también de la peor forma posible: en Instagram, responde a una publicación que dice “Amaia, calienta que sales” con una sonrisa pícara y un corazón. Confirmar no confirma nada, evidentemente, pero en un momento de tensión la respuesta es vista como poco empática respecto de Martínez. Recordemos que Amaia, que en el uso de redes nunca ha mostrado especial tino, compartía también hace unos días una foto repleta de filtros con Xabi San Martín, que procedía a eliminar rápidamente. Los seguidores han atacado cabos ahora.