La semana nos deja con un nuevo caso de abusos de la industria que, la verdad, ha tardado su tiempo en ver la luz, pero imaginábamos desde el primer día. Sean Combs, conocido como Puff Daddy, Diddy o el nombre que queráis ponerle en cada año, ha sido demandado por Cassie, modelo y otrora cantante, con la que tuvo una relación hasta 2018. Por poner las cosas en contexto, se conocieron en 2005, cuando él tenía 36 años y ella 19.

Cassie, que ya ha rehecho su vida con Alex Fine, entrenador personal y padre de sus dos hijos, ha decidido tirar de la manta ahora que ha salido por completo de más de una década de presuntos abusos y vejaciones.

“Después de años de oscuridad y silencio, por fin estoy lista para hablar de mi historia y alzar la voz por aquellas mujeres que también sufren violencia y abusos en sus relaciones.”

Según parece, Cassie habría recibido una oferta millonaria por parte del rapero, que habría rechazado, para permanecer en silencio y no sacar el caso a la luz.

Es un tema, porque el nivel de abusos que Cassie relata en su demanda es incluso más escandaloso, que ya es decir, que aquellos a los que estamos, por desgracia, más acostumbrados. Esta es una lista de situaciones que la modelo narra:

  • Fue violada en casa el día en el que quiso abandonarlo, tras citarse en 2018 para romper la relación. Cassie cuenta que se negó en repetidas ocasiones pero él continuó con el abuso.
  • Sufrió habitualmente puñetazos, patas y pisotones, que le provocaron moratones y heridas, incluso en el rostro.
  • Fue obligada a mantener relaciones sexuales con trabajadores sexuales mientras Diddy se masturbaba y grababa la situación.
  • Debía llevar el arma de Diddy en su bolso para hacerla sentir incómoda con la situación.
  • Fue obligada a conseguir medicación ilegal para Diddy para satisfacer sus adicciones.
  • Fue obligada a consumir alcohol y drogas.
  • Diddy hizo explotar el coche de un hombre que mostró interés por Cassie.
  • Diddy salió corriendo de su apartamente portando un arma de fuego con la intención de disparar a un ejecutivo de la industria de la música, tras saber que estaba cerca de él.

Por descontado, Diddy ha negado las acusaciones a través de sus abogados:

“Durante los últimos seis meses, el Sr. Combs ha estado sometido a la persistente demanda de 30 millones de dólares por parte de la Sra. Ventura, bajo la amenaza de escribir un libro perjudicial sobre su relación, lo que fue rechazado inequívocamente como un chantaje descarado. A pesar de retirar su amenaza inicial, la Sra. Ventura ha recurrido ahora a presentar una demanda plagada de mentiras infundadas y escandalosas, con el objetivo de empañar la reputación del Sr. Combs y buscar dinero.”

Veremos cómo acaba esto, pero vamos, pero como decíamos la demanda de ella es un pretends to be shocked de manual. No imaginábamos menos de aquella relación y, lamentablemente, 2023 confirma nuestras sospechas.

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