Boba Rexha no gana para disgusto con el público generalista: primero se cabrea en redes sociales porque alguien le insinúa que está fracasando y ella responde con un “cómo es que tengo una mansión de un millón de dólares entonces”, y pocos días después, se enfrenta al público presente en una de las actuaciones pre-Grammy, porque no cantaban con ella su mayor hit, ‘Meant To Be’. Perdiendo notablemente los papeles -hasta ella se da cuenta en directo y termina echando el freno-, espeta a los allí presentes que “van a cantar la puta canción si se saben la puta letra”, añadiendo -lógica aplastante alert- que la canción ha estado 50 semanas en Billboard, como motivo por el que los allí presentes deberían sabérsela. Por esa razón de tres, en España todos deberíamos sabernos ‘Flames’ de David Guetta, y ya os decimos nosotros que va a ser que no.
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— Ja.🇩🇴 (@BeyonceCum) 8 de febrero de 2019
En cualquier caso, Boba está de enhorabuena, porque suponemos que en pocas semanas, los viandantes de centros comerciales random en los que pueda aparecer por sorpresa tampoco se sabrán ‘Last Hurrah’, su nuevo single, que cuenta con un tétrico lyric vídeo como compañía, porque ser positiva no se lleva en absoluto ahora (hola Halsey, hola Billie Eilish). Después de que ‘I’m A Mess’ -literalmente, de hecho-, le haya dado 200 millones de reproducciones en Spotify, ¿tendrá también suerte con esto? ¿o lo del single anterior ha sido por el efecto del arrastre y volvemos ya a la situación previa? Por ahora, el tema suma 1,6 millones de reproducciones, habrá que ver si 300 apariciones televisadas, como la última vez, le echan un cable o no.
