La noche del 2 al 3 de diciembre, Aitana y Quevedo no pegaron ojo. No os lo digo yo, os lo dice el vídeo del nuevo single de Quevedo, ‘Gran Vía’, que se rodó realmente en la Gran Vía madrileña. Y si uno ha pasado por Madrid entre principios de diciembre y mediados de enero, una cosa que sabe es que toda esa zona está intransitable a cualquier hora del día en el que la gente se encuentre funcional.
Ergo ese vídeo de Quevedo y Aitana tuvo que ser rodado de franca madrugada. Una madrugada intensa, una de esas madrugadas de Redbulls y bofetada para mantenerse uno despierto. Una madrugada de celo en los ojos para sostenerlos. Una madrugada en la que estoy seguros de que Quevedo lleva gafas de sol porque está con los ojos cerrados bajo las mismas. Porque sé que están realmente allí, que no es que los hayan colocado con CGI: algunas personas en redes sociales compartieron fotografías con ellos, dando así señales de que el vídeo se estaba rodando y los dos protagonistas grabaron un TikTok con el tema allí mismo. Sin que, de nuevo, nadie los interrumpiera pasando por detrás. Una madrugada intensísima.
‘Gran Vía’ merecía tener su vídeo oficial porque ha sido el principal sostén del lanzamiento de ‘Buenas Noches’, el segundo disco de Quevedo. Aunque el artista haya metido los 18 tracks del disco entre los 30 singles más consumidos de la semana -que es fortísimo, considerando especialmente que el lead del álbum, ‘Duro‘, fue recibido con poco entusiasmo-, ‘Gran Vía’ salió disparada hasta el #1 de la tabla española. Ahora mismo el tema sigue en el #1 de Apple Music y Spotify, es #9 en Deezer y era #14 en Youtube antes de la publicación del vídeo. Veremos cómo en las próximas horas se dispara también su consumo en la plataforma de vídeo.
En la primera escucha de ‘Buenas Noches’ nos quedó algo claro: que si bien ‘Gran Vía‘ era el principal gancho del público popero de Quevedo, tenía más del espíritu cheerleader ochentero de determinados momentos de la carrera de Aitana que de la suya propia. Es tan poco ambiciosa y sexy como eficaz para el público de plataformas: suena más divertida de lo que es, es un track agradable y los dos suenan a Spotify kinda hit. Como animando de fondo.
Será tu rollo si: sigues pidiendo palomitas de colores en el cine, aunque te insistan en que saben igual y son más caras que las otras; llevas pulseras de bolitas con mensajes; tienes “casa en la playa”.