Llega la época navideña y con ella, todos los clichés relacionados: el comer turrón hasta el hastío, abuelas intentando fallidamente pasar recetas familiares de generación en generación (siendo la realidad que las acababan de leer en la Revista Mía), villancicos por el pueblo y biopics en el cine.
Este año le toca el turno a ‘I Wanna Dance (With Somebody)’, la enésima revisión de la vida de Whitney Houston, que parece la definitiva porque “de los creadores de ‘Bohemian Rhapsody'”. O sea, que suerte con eso. Whitney Houston sufrirá, desde el más allá y a través del Sony Xperia Z de Anne Germain, otra exposición pública de sus dramas y comedias, esta vez con el tono de película de sobremesa de Antena3 los sábados por la tarde. Porque a poco más apuntaba el tráiler, la verdad.
Cuando uno es un rockero, imaginamos que es más fácil hacer el biopic de uno. En el caso de ellas, mucho chroma, mucha fantasía edulcorada y mucho espíritu de Aline Dieu. ¿La buena noticia de todo esto? Pues la idea de la banda sonora, aunque no tanto en sí el desarrollo de la misma.
Reunir los temas de Whitney Houston en un nuevo disco era un absurdo: la cantante ya dispone de varios, y bastante completos, ‘Greatest Hits‘. Además, en la era del playlisting, ¿sería necesaria otra colección más de los mismos hits en un doble álbum? Para solucionarlo, nos proponen, como decíamos, una buena idea: la de pedirle a DJs actuales remezclar el catálogo de Whitney, llevando lo de ‘I Wanna Dance’ a su máxima exposición.
Y quedan cositas bastante resueltas: Sam Feldt moderniza bien ‘Don’t Cry For Me’, el remix de Kygo sigue sonando fresquísimo, SG Lewis atina con ‘I’m Every Woman’… pero también es verdad que todo da cierta sensación de batiburrillo de sonidos. Lo suyo quizá hubiera sido encargárselo a uno de ellos para que diera cierta sensación de colección coherente. Acorde al espíritu de la película. O igual es que el espíritu de la película se refleja en realidad en este caos sonoro.
Lo peor es que después de los remixes llega el resto de tracks: directos, versiones de estudio y acapellas un poco puestos a la babalá en el recopilatorio. Imaginamos que es porque suenan en el film, pero tampoco hacía falta ir tan al pie de la letra cuando la banda sonora contaba con una idea interesante de origen. Para los clásicos, amores, ya teníamos las plataformas de streaming.