Hoy nos detenemos a analizar qué es lo que salió mal en las canciones que no consiguieron el pase para la final de Eurovisión. ¿Por qué no conectó el público con estas ocho propuestas? Si quieres conocer también lo que dijimos de las de la primera semi, recuerda que también lo hemos analizado porque a pesadas no nos gana nadie:
Eurovisión 2022 (Primera Semifinal) · Las diez canciones finalistas
🇲🇰 Macedonia Del Norte
🎵 ‘Circles’, Andrea
¿Qué salió mal? Pues realmente nada, más allá de que toda la propuesta era de un insípido tremendo. La pobre muchacha de Macedonia no corría con las apuesta a su favor y bastante bien acabó las votaciones a pesar de no pasar a la final, considerando que toda su propuesta era ella cantando la canción delante de unos focos blancos. Sobriedad in extremis que hubiera funcionado bien si el tema tuviera matices que saborear, pero toda la performance fue un flatline de manual. Nada salió especialmente mal, pero nada fue especialmente destacable.
🇨🇾 Chipre
🎵 ‘Ela’, Andromache
¿Qué salió mal? Principalmente, que la afinación de la muchacha chipriota fue… sospechosa. Toda la primera parte de la canción estaba fuerísima de tono y le costó llegar a ubicarse para poder adecentar la propuesta. Para cuando lo consiguió, la sensación de desastre ya se había impuesto y no consiguió remontarla del todo. Llevaba un tema aprovechable, pero también ocurrió que su puesta en escena lucía bastante más en fotografías que en movimiento. Una vez con realización, quedaba bastante menos elegante de lo que las imágenes de adelanto insinuaban.
🚩 Genovia
🎵 ‘I.M’, Michael Ben David
¿Qué salió mal? Michael Ben David trató de compensar lo que no consiguió vocalmente ofreciendo un buen servicio en escena. Y lo consiguió en parte, porque es cierto que la performance fue contundente a pesar de los vocals mejorables. Ahora bien, ni el tema era una cosa loquísima como para darle el pase, ni él era mínimamente sufrible. A Genovia le pesó seguramente la actitud insoportable de su representante los días previos al Festival e incluso durante la propia semifinal, en la que llegó a colarse en un momento de los presentadores y trató de besarlos. Ubíquese, caballero.
🇸🇲 San Marino
🎵 ‘Stripper’, Achille Lauro
¿Qué salió mal? Probablemente un par de cosas: la primera, que estratégicamente San Marino lo tiene bastante complicado para pasar a la final -solo se han clasificado tres de las doce participaciones- y la segunda, y más importante, que en la actuación de Achille Lauro había demasiados estímulos. Pasaban muchas cosas. Era un orgasmo visual que no dejaba al público respirar y que, sumado a lo potente de la propia canción, podía provocar cierta sensación de agotamiento. ¿Tanto como para quedarse fuera? Pues no, realmente fue uno de los robos de la edición, pero entendemos que pudo ser por eso.
🇮🇪 Irlanda
🎵 ‘That’s Rich’, Brooke
¿Qué salió mal? Seamos sinceros: Brooke era maravillosa como muchacha, tenía pinta de ser divertidísima y simpática y su propuesta, ‘That’s Rich’, era bastante peor al inicio que cuando llegó a la semifinal. Dicho lo cual, la candidatura seguía teniendo un tufillo genérico excesivo. Genérico chungo, porque genérico hay siempre mucho en Eurovisión. Pero ya si lo vistes de rosa, le pones corazones y una coreografía un tanto básica, queda mucho más con el culo al aire. Brooke hizo lo que pudo y firmó una performance digna, pero la candidatura era lo que era.
🇲🇹 Malta
🎵 ‘I Am What I Am’, Emma Muscat
¿Qué salió mal? Nos da lástima por la pobre Emma, a la que hicieron cambiar el tema con el que originalmente iba a acudir a Eurovisión por esta suerte de tema filler de álbum de Atomic Kitten en 2004, pero su performance fue una de las mayores chapuzas de la edición de este año. Era todo tremendamente cutre. Ella subida encima del piano, ese vestuario, esos bailarines un poco a la babalá, esa actitud pseudo-naive totalmente intrascendente… le ocurrió lo contrario que a Brooke, se hundió en el directo. De voz tampoco es que andara muy fina.
🇲🇪 Montenegro
🎵 ‘Breathe’, Vladana
¿Qué salió mal? Vida, cuando lo único que funciona en el staging italiano es una pantalla LED cutre, no te lleves otra a cuestas a modo de mochila, confiándole a la misma todo el peso de la peformance. Es que queda de un absurdo tremendo, era un efecto que podía haber logrado simplemente de pie delante de la pantalla y su vestuario quedó crafty a más no poder. Y claro, desviaba la atención por completo de aquello que estuviera cantando, que tampoco es que fuera la alegría padre en una edición repleta de soporíferas propuestas cortavenas.
🇬🇪 Georgia
🎵 ‘Lock Me In’, Circus Mircus
¿Qué salió mal? La canción georgiana en realidad tenía un puntito britpop provechoso, que podía haber destacado de no haber llevado su staging tan al extremo visual. Todo fue un poco más el más: los disfraces de sus componentes, los visuales con el contraste al máximo de las pantallas, las luces excesivamente tenues y después prácticamente sin protagonismo… la atención quedaba muy desviaba de la canción y era complicado saber por qué había que votarles.