¿’Chances’? No nos suena. ¿Era la colonia esa en la que Julia Roberts aparecía rompiendo collares de diamantes porque she ain’t got time for that? ¿O la Charlize Theron recubierta en oro? Si no era una colonia, de verdad que estamos perdidísimos. Francamente, ni idea de lo que habláis.
Y parece que a Justin Bieber está a puntísimo de ocurrirle lo mismo, porque el portazo que le ha dado al álbum con su nuevo single se ha dejado escuchar hasta en el centro del Polo Norte, donde varios pingüinos han sentido el temblor cuando estaban leyendo el último número de la cosmo. “¿Has oído eso, querida?”, “sí, creo que Bieber ha lanzado un single que se mea en todos los temas del proyecto anterior”, “sí, eso debe ser, ¿me pasas, la kettle, querida?”. Por si no habéis consumido los suficientes psicotrópicos como para entender esto último, sí, era una conversación entre los dos pingüinos.
♫ podéis escuchar este y otro puñado de hits en nuestro a-list de spotify ♫
‘Holy’, que une a Chance The Rapper y Justin Bieber por primera vez desde aquel proyecto de 2013 entre el álbum y el mixtape, ‘Journals’, pone al cantante en una posición bastante más interesante: mezcla ritmos del urbano noventero con elementos del góspel, apela a la sensibilidad del oyente con un mensaje amoroso-ñoño bastante tierno, cuenta con un estribillo identificable y además, con un vídeo que apela al sentimiento americanísimo de la fraternidad.
¿Que luego se lo pasan por el forro de sus ‘Intentions’? Pues sí, pero Bieber saca su lado más canadiense para convencer al público más americano. Dos protagonistas de origen humilde -a él no parece que vayan a darle nunca un TP De Oro como Mejor Actor, las cosas como son-, mucha hermandad intercultural, problemas sociales, un final feliz… vamos, que le ha faltado la crema de calabaza para el espíritu de Thanksgiving perfecto.
Recuperamos la esperanza, Bieber. No nos falles en lo siguiente.