Seamos claros: el nuevo single de Jason Derulo, David Guetta, Nicki Minaj y Willy William es una de las mayores chapuzas del año. Podría haberlo compuesto Calatrava y a nadie le hubiera sorprendido. Tiene goteras. Pero no en plan cuatro gotitas con un par de cubos de fregona en el suelo, no, lo que ‘Goodbye’ deja filtrar podría hacer de un centro comercial el decorado de exteriores de ‘Lo Imposible’.
Y es que no vemos que nada funcione: las colaboraciones están en modo Frankenstein, con cada uno haciendo lo que le sale del papo, la producción de Guetta es de un básico y un vago que nadie entiende que provenga de uno de los mayores DJ del planeta, y el sampler debería haberse ilegalizado. Nadie debio dar permiso para fusilar ‘Con Te Partirò’ de semejante forma.
Andrea Bocelli tiene que estar shook en el saloncito de su mansión de La Provenza, tratando de espantar al señor de President que insiste en venderle quesos, pero cuenta al menos con una ventaja: con el estreno del vídeo oficial para la canción, lo bueno es que no podrá verlo, y se ahorrará el 50% del sufrimiento que todo esto está generando. Es una nueva forma de terrorismo. Es prácticamente el Comando Derulo.
El vídeo oficial de ‘Goodbye’ es tan chapucero como la propia canción, no sea que a alguien se le hubiera ocurrido tratar de sofocar el fuego con algo que no fuera fuego: arranca medianamente bien, como tratando de vendernos que tiene una historia con argumento detrás, pero no tarda en combinarse con imágenes de Guetta en un Festival, un concierto de Jason, Nicki delante de la pantalla verde que utiliza para cada feature que graba, Willy William en carnavales -por qué no-, dando lugar a 17 vídeos en uno sólo.
Amigos, es temporada de Amaros, y ya os avisamos de que, para tsunami, el de las nominaciones que esto va a conseguir.