Tory Lanez ha sido declarado culpable de disparar, a propósito, contra la cantante Megan Thee Stallion. La historia ocurre hace un par de años, cuando la pareja está celebrando una fiesta en casa de Kylie Jenner. A la salida, discuten en el coche, Megan sale de él y Tory Lanez comienza a disparar al suelo para ‘asustarla‘, hasta que uno de los disparos alcanza en el pie a la rapera.
La primera versión de Megan Thee Stallion fue que había pisado descalza un cristal en el suelo, y que por eso estaba sangrando. La versión no se sostenía con un simple vistazo a la herida -filtrada en su momento por TMZ-, pero la rapera decidió encubrir a Lanez porque él le había rogado, entre lágrimas, que lo hiciera al darse cuenta de que el disparo la había alcanzado. Megan Thee Stallion confirmó meses después que el miedo de que la policía decidiera disparar a Lanez también la hizo justificarlo.
Ahora, el fiscal del condado de Los Angeles, George Gascón, ha decidido que el rapero es culpable de disparar con negligencia grave, asaltar con un arma de fuego semiautomática y llevar una pistola cargada y no registrada.
Unos hechos que podrían derivar en una condena de hasta 20 años de prisión y la deportación del artista de Estados Unidos, puesto que él es de origen canadiense.
En el juicio, uno de los testigos contó la verdad bajo juramento, asegurando que tras el enfado, Lanez empezó a disparar a la carretera mientras gritaba «baila, zorra, baila», hasta darse cuenta de que uno de los disparos había impactado en el pie de la artista. El fiscal del condado ha aplaudido también el testimonio de la propia Megan tras el veredicto para ‘The Washington Post’:
«Ha mostrado una valentía y una vulnerabilidad increíble con sus palabras, a pesar de los horribles ataques que sufrió sin merecerlos. Las mujeres, y en especial las mujeres negras, aún tienen miedo de denunciar delitos como agresiones y violencia sexual en este país.»
El padre de Tory Lanez perdió los papeles frente a las cámaras después de la emisión del veredicto, asegurando que su hijo es una víctima del sistema y de corporaciones como Roc Nation, llegando a apuntar a Jay–Z por la debacle de su hijo. Se conoce que el sistema le puso una pistola en las manos al pobre aquel día.
