Tori Kelly la cantante, no los zapatitos ou-yeh, que esos eran Lelly, como la ex de Ernesto Neyra. Ya estamos mezclando conceptos y no hemos hecho más que empezar el post. Debe ser la emoción por poder hablar de algo positivo, dentro del mal momento que está pasando la americana. Resumen de la situación hasta el momento:
- Tori Kelly se desmaya hace unos días y permanece inconsciente un largo rato.
- Es hospitalizada de urgencia y la mantienen en la UCI.
- Se le encuentran varios coágulos de sangre alrededor de los órganos vitales.
- Los médicos intentan encontrarlos y salvar la vida a la artista.
Pues bien, parece que tras las primeras horas de incertidumbre, se empieza a ver algo de luz en el caso. Lo hemos sabido a través de las redes del marido de Tori, el ex-jugador de baloncesto André Murillo, que ha compartido este mensaje a través de sus redes sociales:
“Tori está sonriente y sintiéndose más fuerte. No está totalmente fuera de peligro pero empezamos a ver la luz. Estamos esperando algunos resultados más. Vuestro amor y amabilidad ha resultado sobrecogedora. ¡Gracias!”
Parece que las cosas van mejorando en el caso de Kelly, que por ahora sigue ingresada en el hospital esperando a ser posiblemente trasladada a planta pronto. Veremos si continúa por esta senda y se puede celebrar rápido su salida del hospital.
Por poner un poco de contexto pop, llamémosle poptexto, a la artista, os contamos sobre ella que tiene 30 años y aunque fuera de Estados Unidos no es especialmente popular -sólo su primer álbum, de 2015, tuvo algo de impacto internacional-, en el país es muy valorada sobre todo en los ambientes góspel más accesibles. Desde el inicio de su carrera ha conseguido colar en Billboard tres singles, con los que ha sido dos veces Platino y una Oro. Es además dueña de dos premios Grammy en las categorías góspel, en las que se hizo con los galardones a Mejor Álbum y Canción en 2019.