The Weeknd cumplió con las expectativas anoche y firmó un halftime de la Super Bowl muy a la altura. Que esto igual no debería ser noticia, porque los intermedios siempre son espectaculares, pero resulta que la final deportiva siempre tiene una peculiaridad: los espectáculos siempre suelen ser espectáculo cuando los llevan a cabo las mujeres. Los de los hombres… meh.
Y eso que en los años más recientes son muchos los que lo ha intentado: en 2014 Bruno Mars tenía los hits pero fue poco ambicioso en la puesta en escena, en 2016 a Coldplay les colgaron a Beyoncé y el propio Mars sin venir muy a cuento, en 2016 Justin Timberlake confirmó estar en horas bajas y no me hagáis hablar de la pérdida de tiempo que fue lo de Maroon 5 en 2019. Maroon 5, una banda que se pone a ir de rockera en el momento en el que menos debía serlo. Total, que tendríamos que retroceder a 2011 para ver a unos The Black Eyed Peas con sentido del show, y eso que ahí aún estaba Fergie.
Total, que no lo tenía muy difícil, pero The Weeknd ha levantado el show a base de hits, performance y cambios de escenario a pesar de lo aparentemente estático del suyo. Ha arrancado en lo alto del estado en lo que aparentemente era una imagen fija que se descubría después como ilusión óptica, ha cantado con un coro góspel robótico, se ha perdido por pasillos muy Vegas repletos de luz, ha cantado en la azotea de una gran ciudad y ha bajado al campo a terminar cargándose al hombre de las vendas en la cara en un ‘Blinding Lights’ que servía de colofón.
Puntualicemos también lo que nos ha parecido más discutible. Por un lado el sonido de su micro, que no parecía estar bien calibrado y se ha quedado algo por debajo de todo el acompañamiento; por otro, el hecho de que toda la narrativa de la actuación la haya realizado con el outfit de la chaqueta roja que empieza a indigestársenos.
Eso sí, los hits han compensado la bola del oufit: han sonado ‘Call Out My Name’, ‘Starboy’, ‘The Hills’, ‘Can’t Feel My Face’, ‘I Feel It Coming’, ‘Save Your Tears’, ‘Earned It’, ‘House Of Balloons’ y ‘Blinding Lights’.