TMZ apuntaba esta pasada semana a que Spice Girls estarían preparando una gira por el Reino Unido y Estados Unidos a pesar de la pública negativa de Victoria Beckham, que, según prácticamente todas las fuentes, habría accedido a la reunión si no implicaba que tuviera que volver a los escenarios.
El medio amarillista americano, a pesar de todo, daba por ciertos los rumores, y la noticia se esparcía como la pólvora por internet hasta que Victoria ha hablado para Vogue en una reciente entrevista, en la que ha confirmado que no habrá gira Spice.
“No voy a salir de gira. Las chicas no van a salir de gira. Fue genial reencontrarnos, lo pasamos genial durante la comida. Fue realmente encantador. Todavía hablo con todas las chicas por separado, pero el volver encontrarnos las cinco fue maravilloso. (…) Hay algo realmente fuerte en el mensaje que transmitían Spice Girls. ¿Qué estamos planeando para el futuro? ¿Cómo será todo? Estamos lanzando ideas, simplemente. Haciendo brainstorming. Pero esto (la moda) es lo que yo hago ahora.”
Francamente, esperábamos y entendemos la decisión de Victoria Beckham, pero del mismo modo, como fans de la girlband, vemos un absurdo que hayan decidido reunirse para algo más que un café, considerando que, dando la negativa a un comeback musical, tienen el resto de vías más que agotadas: hemos tenido varios documentales, oficiales y no, varios libros oficiales y otros tantos que no, biografías autorizadas y no autorizadas, un álbum de grandes éxitos al que no queda nada por añadir, un musical, una película, una gira de reunión y una aparición estelar final en los Juegos Olímpicos.
Si el proyecto no va a aportar un tour o nueva música, las chicas deberían centrar esfuerzos en no dinamitar el recuerdo del grupo y su efecto nostalgia, y sobre todo, deberían abstenerse de participar en sandeces del estilo de “un talent show asiático”, cosa que se ha rumoreado con fuerza. Dejemos el recuerdo estar, y a lo sumo, reeditemos en condiciones lo que ya ha visto la luz.