Lo de Abraham Mateo es un caso digno de estudio de los años recientes del pop español. De pronto, y varios años después de su exitoso debut en España, el artista se convierte en el intérprete a exportar por parte de Sony Music, que invierte los dineritos en que abra fronteras y consiga conquistar latinoamerica.
El plan era sencillo: de pronto debía tener acento mexicano neutro de telenovela de TVE 1994, debía ir pintado a brocha gorda en plan tanorexia -la enfermedad, no la cantante de ‘I’m Outta Love’-, y debía estar rodeado de cada artista que pudiera otorgarle centenares de miles de escuchas en plataformas de streaming.
Y la hucha hizo obrar el milagro con ‘Loco Enamorado’, un trío con Farruko y Christian Daniel que lo ha llevado a superar las 150 millones de escuchas en Spotify y a ser top10 en un buen número de países latinos. En España se quedó con un #13, pero siendo Doble Platino, su mayor éxito en singles desde el Oro de ‘Señorita’ en 2012.
Sony se confió y siguió lanzando billetes al aire, contratando para Mateo a 50 Cent, Austin Mahone, Jennifer Lopez, y Yandel. Pero oopsies, la fórmula ya no funcionaba. El rip-off de ‘Attention’ que era ‘Háblame Bajito’ se quedó con las ganas, posicionándose en la zona baja de las listas latinas, y el dúo con J.Lo pasó absolutamente sin pena ni gloria, y suma apenas el 10% de las escuchas de ‘Loco Enamorado’. La intentona de empujar a Mateo al A-List no dio los frutos que se esperaban de ella, y para colmo de males, en España tampoco consiguió nada.
Ahora parece que el pushing a la fuerza que se había hecho con el cantante queda abruptamente cancelado, y su nuevo single, ‘A Cámara Lenta’, no incluye ni el feature de algún rapero rándom del momento. Veremos si consigue algo con el tema, un número de latineo simpático y funcional, y hasta cuándo va a poder estirar este perfil de faux-ídolo latino que se trae entre manos.
Nosotros, aunque se quede con el estilo musical, sólo le pedimos que deje de pronunciar como si fuera la madre biológica de Chabelita.