Ay, qué complicado es hablar del caso de Jesy Nelson. Primero porque habla de un problema de salud mental, que siempre es un tema delicadísimo y con el que la sociedad está cada vez más concienciada. Segundo porque está enmarcado en un rollo fan que, tires hacia donde tires, generalmente hará que salgas mal parado. De modo que hay pocas formas de hablar del tema con franqueza que eviten que al menos el 50% del público se te eche encima.
Vamos a ello: Jesy Nelson ha compartido unas imágenes suyas en el estudio de grabación. Justo dos meses después de abandonar Little Mix por problemas personales, entre los que se cuentan el juicio de la prensa y los fans a su imagen física. Y si bien cada uno es un mundo y gestiona las cosas a su manera, no deja de sorprender que, salvo esta imagen del estudio y un par más, el resto de publicaciones en su muro sean fotografías suyas sobreproducida, idénticas a las que compartía cuando formaba parte de Little Mix. Es decir, que si hay un problema con el tema físico, algo nos dice que no está del todo superado.
Sin embargo, hemos dicho que vamos a hablar con franqueza, de modo que os lo decimos claramente: no nos tragamos absolutamente nada de esta narrativa de Jesy Nelson. Sí creemos lo ha pasado mal, claro está, sí creemos que pueda tener problemas de ansiedad y autoestima. No nos creemos que ese fuera el motivo de abandonar Little Mix.
“Su problema es que la comparaban con las otras tres chicas, en solitario ese problema no existe”, argumentan algunos fans. No es cierto: todos los artistas sufren comparativas. Todos. Seguirán comparándola cada vez que pise un plató, una gala, una alfombra roja, un estudio, un teatro. Siempre van a compararla. A ella y a todos los demás. ¿Igual no debería ocurrir? Igual no, pero abandonar Little Mix no es la varita mágica que solucione ese problema.
Seguimos manteniendo que el problema de Jesy Nelson no era sólo la salud mental y las comparaciones, era ‘Confetti’. Nelson vio en ‘LM5’ una vía de escape al pop radio-friendly que venían haciendo previamente, pero con el fiasco del álbum y el giro de vuelta a algo más popero de las chicas, Jesy volvió a perder interés en el proyecto. Igual que, salvando las distancias, Zayn estaba hasta el higo del pop-rock de One Direction. Igual que Robbie Williams quería dejarse de coreografías horteras. Lo más probable es que ese desencuentro creativo pesara más que el resto, aunque es probable que también pesara, igual que en su día Geri Halliwell acabó harta de no tener tiempo personal para hacer nada y decidió salir de Spice Girls.
Y al igual que ella, sólo que con peor argumentario, Jesy Nelson deja a su grupo tirado con una gira pendiente y un disco a medio promocionar. Un disco, por cierto, que ha supuesto un boost de popularidad para las chicas respecto al anterior. Nuestra apuesta es que Jesy Nelson quería frenar su agenda non-stop, sí, pero también virar al urbano. De ahí que su colaboración en ‘Confetti’ sea ninguna. De ahí que en dos meses esté pensando ya en ser otra Mabel más en el infinito catálogo de Mabeles británico.
Va a necesitar mucha suerte para no acabar en ‘Dancing On Ice’ antes del final de 2022.
