¿Recordáis cuando a Ava Max le llovían críticas porque parecía un rip-off de la Lady Gaga de 2009? Misma estética, mismos gestos, misma intención de hacer de un body de látex y una peluca de Raffaella algo escandoloso… claro que una década tarde. Pues bien, ha llegado un punto en el que casi echamos de menos que esa fuera su dirección artística. Los primeros días de publicación de The Fame.
Porque de verdad, en lo últimos años, su artista de referencia ha pasado de Lady Gaga a la Orquesta Panorama. Ava Max es una verbena en sí misma, su cabeza y criterio artístico es una mezcla entre canciones de Marcela Morelo y éxitos de los ochenta que se versionaron ya en Glee. Hemos perdido la cuenta de las canciones de catálogo de recopilatorio ‘anunciado en TV’ que ha versionado, sampleado o adaptado en sus últimos singles.
La última ha sido Forever Young, junto a David Guetta y Alphaville. Una canción tan prostituida que podría estar a la venta en formato físico en la Casa de Campo. Una canción tan reciclada a estas alturas que hace parecer el sampler de Dido del 2AM de Sebastián Yatra algo tremendamente refrescante. Al lado de esto es un sorbito a un Nestea con hielos en una noche de 38 grados en plena ola de calor estival.
Desde aquí hago un llamamiento a las autoridades, a la mismísima ONU, para que se tomen de una vez cartas en el asunto. Que se emita una orden de detención para David Guetta -que ya es 2025, la broma se ha extendido lo suficiente-, otra para las radiofórmulas europeas -culpables en gran medida de que estas insustancialidades sigan ocurriendo- y una final para Ava Max. Una orden que la Interpol ya debería haber tenido entre manos después de la salida de Whatever, con Kygo, que sampleaba de forma infernal el Whenever, Wherever de Shakira, pero que ahora debería ser de efecto inmediato. Orden de cárcel. Cadena perpetua.
Es que, de lo contrario, en un plazo de tres años, la tendremos haciendo covers de Bach y Wagner -el compositor clásico, no el concursante de The X Factor-, porque no le queden ya clásicos que hacer what-she-calls suyos.
Será tu rollo si: tu canción favorita del año pasado es una que tienes que describir como “sí, esa de…” y empiezas a tararear algo desafinado; tu libro favorito es ‘El Principito’ y tu película ‘Titanic’; el disco que llevas en el coche está en CD y es “Los #1 de Los40”.