Ya anunció Leigh–Anne que antes de la publicación de su álbum debut, anunciado originalmente como ‘Love Letters From Leigh-Anne’, llegarían tres temas con la palabra ‘amor’ como leit motiv. El primero yo lo conocimos, el garage-pop ‘Don’t Say Love’ que la llevó a un fugaz #11 en el Reino Unido, y ahora presenta el segundo, ‘My Love‘, más enfocado en el afrobeat. Un género que ha arrasado en UK este verano gracias a la omnipresente ‘Calm Down’ de Rema (y Selena Gomez, según el momento y emisora), pero también gracias a ‘People‘ de Libianca, que ha ido a las mil maravillas en las listas del país.
Y pues a hacer afrobeats y rendir homenaje a su nula conexión africana, la británica ha colaborado con Ayra Starr -no confundir con la muchacha de ‘Juego De Tronos’ de discutibles timings y cortes de pelo-, que ella sí es nigeriana, y ha acudido hasta Nigeria a rodar el clip de la canción.
Y allí, rodeada también de un equipo de bailarines locales, ha lucido su mejor mirada felina de costado, bien fuera en mitad de la ciudad que dándose un baño en un día nubladísimo como si hubiera nacido en Azpeitia y a cualquier cosa le llamara buen tiempo. Leigh-Anne se marca una coreografía al ritmo del estribillo de la canción, desborda actitud de diva durante los versos y viste de simbología y color toda la propuesta.
¿Nos encanta? Pues no especialmente, porque nos lleva un poco a estos singles de Ciara o Kelly Rowland en los que intentan resultar lo más ‘gente-de-la-calle’ posible y acaban luciendo un poco ‘Real Housewives Of Whatever País Africano I’m Pretending To Relate To’.
Podrías ser peor, pero también podría haber tenido mayor relación con su carta de presentación. En este momento nos quedamos sin ver por dónde van los tiros. Esperaremos a la tercera propuesta.
5.5
Será tu rollo si: tienes ‘Black Is King’ hasta en una edición VHS autoeditada, te has apuntado a unas clases de Zumba que no piensas pisar hasta después de Navidad, te has hecho trenzas en un resort cuatro estrellas de República Dominicana.