El regreso de ‘La Voz’ ya se promociona en Telecinco, y como anualmente, sus jueces van a tratar de sacar el máximo partido de su paso por el concurso: algunos como Juanes, estirando el chicle de un disco que no ha tenido buenos resultados comerciales, y otros, como Malú, anunciando su regreso con un nuevo single, ‘Invisible’.
Con el adelanto de la canción avisábamos de que la cantante de clásicos como ‘Antes De Amantes, Amigos’ había decidido tomar parte del Efecto David Bisbal girando hacia el pop más pop, eliminando las influencias rock o aflamencadas que anteriores lanzamientos habían tenido. Así, ‘Invisible’ se presenta como una canción de base más tropical, no necesariamente demasiado veraniega, y un poco al estilo del último lanzamiento de Pablo Alborán, ‘No Vaya A Ser’, que además, comparte productor con ella. Julio Reyes, el hombre a cargo de ambos lanzamientos en cuestión, fue cuatro veces nominado a los últimos Grammy por sus trabajos con, por ejemplo, Laura Pausini o Diego Torres.
Pero el problema, más allá del sonido del tema, que puede irle mejor o peor a la cantante, es que toda la canción es demasiado lineal: Malú siempre ha sido popular por parecer dejarse la vida en cada tema, por cantar las canciones como si dos personas la sujetaran y ella quisiera tirar hacia delante soltándose, como si fuera a quedarse sin aire, en un constante increscendo. Sin embargo, en ‘Invisible’, se la traga la estructura. Cuando parece que el middle 8 del single va a arracarnos una sonrisa por ver a Malú dejarse todo tras él, las cosas se apagan y sólo fuerza las cuerdas en un par de insuficientes notas. Al final, el estribillo, muy ‘Behind These Hazel Eyes’ de Kelly Clarkson -como ya se intuía-, no da para mucho más.
Al final, porque es Malú, pero de haber lanzado este single Belinda, ya os decimos que se hace realmente ‘Invisible’.