Durante las próximas semanas, nuestra intención será analizar el paso de España por Eurovisión: sus éxitos, sus fracasos, sus delirantes puestas en escena… todo bajo nuestra particular lupa. Como no queremos que la historia se alargue hasta el próximo 2029, y con la intención de hacer más secciones de carácter estúpido, hemos decidido comenzar nuestra andadura eurovisiva en 1990. ¡Esperamos que disfrutéis de este viaje de 25 años!
La canción
La canción era la tercera balada consecutiva para España en Eurovisión y la quinta de los últimos 6 años hasta entonces. Con lo cual, podríamos decir España tenía que haber probado suerte con otra cosa. Lydia, que había sido apadrinada por Alejandro Sanz y tenía dos álbumes en el mercado con buenos resultados de ventas, se puso al frente de la delegación española con ‘No Quiero Escuchar’, una balada compuesta por su hermano, que, al menos, tenía un rollo más actual que las de anteriores años en lo que a melodía y producción se refiere.
La propia Lydia ya diría años después que estaban seguros de que ‘Escuchar’ no era la apuesta más apropiada para el festival, y que TVE se empeñó en llevarla en contra de los consejos de su equipo. Una historia de celos con un rollito algo Presuntos Implicados -curioso, pues es ella la actual cantante del grupo- y un intento de modernización de España que, sin embargo, ya podía haber llegado en otro formato que no fuera el de la balada. En este año, ya nos imaginamos a Europa aprovechando para ir al baño cuando Lydia salió a escena. Por cierto, la cantante fue la actuación 800 de la historia del Festival.
https://youtu.be/P-GcCDlY_Aw
La puesta en escena
La puesta en escena se cargó varias cosas al mismo tiempo: las posibilidades de la canción aquel año, a quien nadie estaba haciendo caso, el marcador final de España, y la carrera de Lydia, que casi fue un chiste a su vuelta de Eurovisión. Lydia confirmaba, con el lanzamiento de su siguiente álbum, que el vestido vino impuesto por el equipo de TVE y que, evidentemente, ella jamás lo hubiera elegido. Es más, siempre nos pareció que Lydia no iba peinada ni calzada acorde con el cuadro de Ágatha Ruiz De La Prada que llevaba encima, con lo que, creemos que en su cabeza había otra idea completamente distinta a la que terminamos viendo.
En cualquier caso, además del vestido -que imaginamos trataba de apelar al sentimiento LGTB+ europeo tras la victoria de Dana International el año anterior-, la composición de la actuación era también de traca: esos planos a un coro en el que la muchacha de la izquierda iba un poco a su bola (sí, ella inventó el hacerse un Geno) no ayudaron nada a una Lydia que ya había lapidado sus posibilidades.
El resultado
Atroz. El resultado fue atroz: sólo Croacia se dignó a puntuar a España con un mísero puntito, que terminó dejando a Lydia en la última posición del festival, puesto que, a Dios gracias, España no ha vuelto a pisar desde entonces. Habían pasado 16 años desde la última plaza de Remedios Amaya en 1983, aunque es cierto que en la barca de Remedios no se subió ni Croacia siquiera.
La ganadora de aquel año fue Charlotte Nilsson (ahora Charlotte Perrelli) con ‘Take Me To Your Heaven’: la canción sueca, un rip-off de cualquier clásico de ABBA, no partía siquiera en la parte alta de las casa de apuestas, pero un factor se les había escapado a la hora de calcular los resultados, el televoto podía variar, y de qué forma, el resultado de años anteriores con jurado. Por tanto, Suecia dio la campanada, Chipre -que partía como favorita- no consiguió más que 2 puntos, y España, que parecía ir a conseguir un resultado digno, terminó hundiéndose con un televoto todavía alucinado por el trozo de tela de colorines. Era la cuarta victoria para Suecia en el Festival, aún faltaba para que se consolidaran como uno de los países a la cabeza de Eurovisión.
https://youtu.be/ZzkxGlVznLQ
¿Qué fue de ella?
Después de Eurovisión, no hubo mucha más Lydia: en 2003 publicaba su último álbum en solitario, ‘Si No Me Pides La Vida’, con el que lograba un relativo éxito en radios gracias a ‘Esta Vez No Caeré’, pero fue el único de sus tres álbumes que no consiguió una certificación, quedándose -en teoría- a 20.000 copias de lograr el disco de oro de aquella época. Después, un remake de ‘La Gran Familia’ en Antena 3, un ‘Grandes Éxitos’, una campaña publicitaria para Iberia, ‘Jesucristo Superstar’ y, finalmente, su paso a ser la nueva vocalista de Presuntos Implicados en 2007.
Con ellos, editaría un álbum de estudio, uno de versiones y uno en directo antes de que la banda anunciara su separación -en teoría, temporal- en el año 2015. Un año después, Lydia anunció que volvería en solitario en redes sociales, anticipando incluso el título de su nuevo single, pero meses después, no ha habido actualización alguna al respecto, y en el timeline de la artista, uno de sus último tweets que figura es sobre un cupón del supermercado Día.