Lola Indigo tiene una gira por estadios pendiente en los próximos meses: actuará en el Wanda Metropolitano en 14 de junio, en La Cartuja el 21 y en el Estadio RCDE el 12 de julio. Y para llegar al verano, su último álbum, El Dragón, quedaba un poco lejano. Necesitaba un momento revival que, por otra parte, la artista ya había prometido en forma de reissue a través de un EP añadido, Nave Dragón.
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Un EP que ha terminado siento un disco completo con 10 temas nuevos y un remix -falta una canción, 1111111, por liberarse-, que la verdad, luce un poco Tension II en general. Un disco de Kylie que se llenaba con material bastante menos inspirado que su catálogo habitual y que lucía innecesario de no ser por resultar sostén del tour y justificación del mismo. A Nave Dragón le pasa lo mismo.
Sin Autotune, el single que lo presenta, no es el material más inspirado de Lola Indigo. En cualquier otro momento, hubiera sido uno de esos singles valle entre erar que servirían para mantener la atención del público sin resultar un hit especialmente notorio. Ahora, se coloca en posición de ser el lanzamiento focal del trabajo completo. Un disco que va a agradecer tener el remix de La Reina aún con apoyo en Spotify, porque no pinta a que este nuevo corte de lamentos en la pista de baile le vaya a funcionar mejor a Dolores. Ya lo vimos en Perreito Pa’ Llorar, que tenía la misma vibra pero cierto efectismo extra.
Y eso que, en el pop, el momento drama coreografíado es un acierto por norma general y por norma duval. Pero no es el caso: la canción termina funcionando, si acaso, por el imán de Lola en pantalla cuando uno ve el vídeo. Por la coreografía, por la face-card, por ese hambre de estrellato que tantas alegrías le ha dado y le sigue dando a su intérprete. Porque ella se desvive en vender hasta el objeto más inútil hasta que lo terminas comprando.
Pero lo cierto es que Lola funciona mejor en la garra, en el morro, en poner el coño sobre la mesa y hacer del mundo entero su Ausonia con alas. En la tibieza de temas como Sin Autotune, más allá del momento ternura y un álbum track que tampoco skippearíamos, no luce tanto. Dicho todo esto, es curioso que Nave Dragón sea el proyecto que ve la luz después de que el vídeo de Lola Indigo diciendo que sus discos “no tienen relleno” haya impactado las redes sociales.
Será tu rollo si: tienes de fondo la playlist más random de Spotify mientras trabajas; te gusta el flan de café; tienes, por algún motivo, forro de libros en un cajón de casa.
