Tenemos el cupo de drama bastante llenito con el tema de Amaia Montero y Cayetana Guillén Cuervo, pero no perdamos de vista el otro punto focal del salseo pop patrio: la gira de estadios de Lola Indigo. Después de tener que mover la fecha madrileña de un Bernabéu sold out a un Metropolitano con todavía algunas entradas a la venta; la cantante ha tenido que cancelar el concierto de Barcelona.
Lo ha hecho apenas unas horas después de soltar un órgado en El Hormiguero, programa en el que denunciaba que el Ayuntamiento de Cornellà les acababa de anunciar que el concierto no podría realizarse y que, si acaso, debería adelantarse un mes para cumplir con las promesas hechas al pueblo, de un concierto al mes para limitar ruidos.
El Ayuntamiento ha compartido un comunicado asegurando que Lola Indigo no dice la verdad, que esta situación se le comunicó en diciembre y que fue en febrero cuando se les sugirió cambiar la fecha del show:
“En diciembre de 2024, la empresa promotora planteó la posibilidad de organizar un concierto de Lola Índigo en el estadio del RCD Espanyol. Desde el primer momento, el Ayuntamiento comunicó que la fecha propuesta del 12 de julio no era viable, por razones vinculadas al calendario de eventos culturales, sociales y urbanos de la ciudad, así como para respetar el compromiso con los vecinos del barrio y el acuerdo establecido con el propietario del estadio.
(…)
Como alternativa, en el mes de febrero, se ofreció a la promotora y al equipo de la cantante la posibilidad de celebrar el concierto durante el mes de junio. Esta propuesta no fue aceptada y, por lo tanto, desde hace meses se sabía que no sería posible llevar a cabo el concierto el mes de julio.
El Ayuntamiento lamenta que se haya mantenido la venta de entradas, a pesar de no contar con ninguna autorización municipal desde buen comienzo. También sorprende que, en ningún momento, ni desde la página oficial ni desde las redes sociales de la cantante, se haya planteado un cambio de fecha para poder hacer el concierto en el mismo estadio, ni tampoco se hayan tomado medidas para compensar las personas que ya habían adquirido entradas, como han hecho otros artistas.
El Ayuntamiento no quiere entrar en una polémica que no ha creado, y mucho menos con la artista Lola Índigo o su promotora. Sin embargo, considera que las declaraciones realizadas son inciertas, injustificadas y fuera de lugar, y por este motivo contempla emprender acciones legales.”
Al menos una de las cosas es completamnete cierta: desde el mes de diciembre se pone el jaque la cita, porque yo me hago eco en la web de que el Estadio asegura no tener constancia de que el concierto se fuera a realizar. Y ciertamente, las entradas se ponen a la venta. Es más, siguen a la venta una vez toda esta situación explota y se prevé su cancelación.
Lola Indigo, tras el riesgo de ser denunciada por el consistorio y viendo que su estrategia televisiva no ha tenido éxito porque Cornellà decide no recular, suspende el concierto allí previsto y deja su tour con las fecha de Madrid y Sevilla:
“Desde GTS Management, oficina de representación de Lola Índigo, tras las informaciones publicadas por el Ayuntamiento de Cornellá hace unas horas, lamentamos informar de la cancelación del concierto que nuestra artista tenía intención de llevar a cabo el próximo día 12 de julio de 2025 en el RCDE Stadium de la precitada localidad.
Con gran perplejidad nos vemos en la triste situación de tener que aclarar determinadas declaraciones expuestas que no concuerdan con lo ocurrido, a pesar de haber obrado desde el primer momento con total rigor y profesionalidad junto a las entidades legitimadas para la explotación del recinto, con las que cerramos un acuerdo de cesión del mismo semanas antes del anuncio del show.
En primer lugar, queremos remarcar que no se ajusta a la realidad la afirmación de que éramos conscientes desde el primer momento de la no viabilidad del concierto. Tampoco es cierto que se nos comunicara que existía un acuerdo con el RCD Espanyol por el que únicamente se permitía programar un acontecimiento no deportivo al mes en el estadio y resulta evidente que si hubiéramos conocido esta información no habríamos anunciado y puesto a la venta las entradas del concierto en la fecha señalada.
En cuanto a la única posibilidad que ofreció el Ayuntamiento de adelantar el concierto al día 7 de junio, por razones evidentes de preparación técnica, fabricación de escenarios, ensayos y demás factores que influyen en el tiempo de preparación de un show de estas características, la propuesta resulta del todo inviable además de por multitud de incompatibilidades -logísticas, agendas de artistas, bailarines, técnicos y un largo etcétera que hace que nuestra posición no sea ni mucho menos caprichosa-.”
Hay un detalle en toda esta gestión que a mí me llama poderosamente la atención. Si el RCDE Stadium de Cornellà tiene 37.800 entradas disponibles y Lola asegura en El Hormiguero que llevan vendidas unas 20.000 entradas… ¿cuál es el punto de todo este show de estadios? Es decir, en el Palau Sant Jordi, una arena en la que los conciertos son completamente habituales y se dan sin problema porque está hecha, entre otras cosas, para eso, caben 18.000 personas. ¿En qué momento hemos llegado al punto de que los artistas sientan la necesidad de que su éxito se mida en estadios?
De hecho, la cita sevillana también está modificada: no se pondrá a la venta el estadio completo sino, como suele ser habitual, la mitad. Es decir, que la asistencia quedará lejos, lejísimos de sus 70.000 asientos de capacidad. Si el punto no es que la mayor cantidad de público pueda disfrutar del show… ¿el punto el simplemente el ego de los artistas?
Pues ya se nos ha ido de las manos por completo el punto de la imagen.