Han pasado tres años desde que Little Mix anunció su separación. Que se dice rápido, pero empieza a ser tiempo. Y el problema es que sus tres componentes están enfocadas en sus carreras en solitario, pero ninguna de ellas termina de perfilar un proyecto de forma contundente.
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Por ponernos en contexto, tres años después de la separación de Spice Girls, en 2004, dos componentes tenían dos álbumes en la calle, otra estaba a punto de publicar el tercero, Mel B había tenido tiempo de convertirse al indie y Victoria había decidido ser modista de tanto pegársela. Tres años después de la separación de Destiny’s Child, ya habían vuelto con Destiny Fulfilled. Tres años después de separarse Girls Aloud, en 2012, también habían decidido volver. Pero con una Cheryl con varios platinos bajo el brazo. Tres años después de la separación de Fifth Harmony, el Aldi había ganado cuatro chicas de almacén.
Pero con Little Mix, aquí estamos, como viéndolas venir. Echemos un vistazo a qué es lo que está haciendo cada una de sus integrantes en este rollout que no sabemos exactamente qué proyecto anticipa.
Perrie
Perrie publicó tres singles en 2024. El primero, Forget About Us, está certificado Plata en UK y fue #10, pero los otros dos no llegaron a hacer demasiado ruido. Habiendo anunciado que su primer disco dependía del funcionamiento de esos temas, quedó claro que el proyecto había quedado en suspensión.
Y cuando la imaginábamos ya centrada en otros proyectos, resulta que en verano de 2025 cambia el logo de su perfil, anuncia un presunto comeback y presenta un nuevo single en el hipódromo de Ascot, dentro del evento Dubai Duty Free Shergar Cup. Que ya debería darnos una pista de lo que va a ocurrir con todo esto, porque da unas vibras de Merche actuando en la Feria Del Queso de Loyola Del Ovillo que echa para atrás.
Perrie parece arrancar una nueva era con If He Wanted To He Would, pero… ¿dará frutos esta vez? ¿No hubiera sido más fácil anunciar el single sin fingir que todo esto es el inicio de “algo“? Porque cuando el “algo” agoniza, lo mismo es que el público tampoco está demasiado por la labor.
Leigh-Anne
Tengo una teoría: si viendo la estética y sonido de alguien, puedes compararlo al de algún alumno de las últimas hornadas de ‘OT‘, créeme, ese alguien está recalentando los nachos de otro artista. En este caso, Leigh-Anne y Suzete están robando Doritos de la bolsa de Tyla, y la propia Tyla tiene ya problemas para vender su Rihanna del primer álbum gone digna. Por tanto, imaginad las dificultades de la compra del Dorito fofo.
Leigh-Anne ha aprovechado que tiene ancestros de Barbados y Jamaica —énfasis en ‘ancestros’— para disfrazar todo su proyecto de afro-beats y tropiqueo, aunque ella haya crecido toda la vida como británica. Que esto es un melón que algún día se abrirá, como cuando Beyoncé se disfrazó de keniata en The Gift, por el mero hecho de ser negra.
Más allá de esto, Leigh-Anne ha tenido tiempo para lanzar algunos singles bajo sello, con el primero de ellos, Don’t Say Love, llegando al #11 antes de desplomarse. El poco ruido del proyecto la llevó a ser independiente en cuestión de meses y replantearlo todo… un poco en la misma dirección, la verdad. Veremos si Leigh-Anne termina de dar forma a un debut en algún momento. Por ahora, continúa la promo de su último single, Been A Minute.
Jade
La aparente gran apuesta de Little Mix como solista era Jade. Y su primer single, Angel Of My Dreams, parecía confirmar que así sería. Gran carátula, gran canción, gran vídeo, gran promo, grandísima actuación en los últimos Brit Awards. Pero single a single, también su proyecto se ha quedado un poco en bluff. Ninguno de los singles posteriores ha recuperado el éxito comercial (Angel fue #7 y es Oro en UK) ni el hype por el disco, que se ha retrasado hasta límites que han disipado todo interés masivo por él.
Si bien se está hablando de buenos números en pre-order, la realidad es que las expectativas del público generalista por That’s Showbiz Baby, al que todavía le queda un mes por delante antes de ver la luz, están bajo mínimos.
Y eso que Jade cuenta con algo que sus compañeras no: el apoyo de las radios británicas —han pinchado sus últimos singles de forma masiva a pesar del pasotismo del público (Plastic Box aún es #24 en radios, aunque solo pasara una semana en el top 75 de la lista de singles, en el #44)— y el apoyo de festivales y medios más independientes, especialmente animados por el lead del proyecto.
That’s Showbiz Baby debía haber visto la luz hace tantísimo tiempo que más de 25 canciones de las sesiones del álbum llegaron a filtrarse en internet en perfecta calidad. Incluyendo todas las canciones inéditas que finalmente irán en el disco. La pregunta ahora es, después de estos meses, ¿las habrá remezclado de nuevo para el disco o saldrán tal como se filtraron?
